LAS PRIMARIAS COLOMBIANAS

 

Para dar comienzo, al asunto que nos ocupa hoy, nos debemos de apoyar en la sentencia T-232-14 de la Corte Constitucional que expresa…

“El derecho a elegir y ser elegido es, un derecho de doble vía, en el sentido de que se permite al ciudadano de concurrir activamente a ejercer su derecho al voto o, también, a postular su nombre para que sea elegido a través de ese mecanismo”.   

LO IGUALMENTE CONSAGRADO EN LA CARTA MAGNA

De los partidos o movimientos políticos... Que para el caso colombiano está consagrado en el artículo 107 de la Constitución Política de Colombia.

“Se garantiza a todos los ciudadanos el derecho a fundar, organizar y desarrollar partidos y movimientos políticos, y la libertad de afiliarse ellos o retirarse. En ningún caso se permitirá a los ciudadanos pertenecer simultáneamente a más de un partido o movimiento político con personería jurídica.

La participación en política en una sociedad libre por parte de la ciudadanía es una - como la autonomía de los poderes públicos, la limitación del poder, el debate y la negociación para la resolución de conflictos, el sufragio universal y secreto, periódico y libre y la responsabilidad ciudadana, entre otras - característica de lo que entendemos por democracia, ya que se entiende como una forma de gobierno basada en la participación ciudadana.

Que, en la práctica supone, promueve los derechos humanos, la libertad de expresión, la igualdad de oportunidades; al tiempo que procura la justicia y el bienestar de la sociedad. Lo contradictorio, de todo lo anterior, es que en la cotidianidad casi siempre sucede todo lo contrario; ni en el mismo orden de ideas. ¿Cómo será la misma situación en un Estado Totalitario? O será que ¿Mal de muchos, consuelo de tontos? Ojo con eso.

Otras versiones, que hoy nos ayudan a marcar el camino sobre el asunto que nos ocupa hoy, indican que la verdadera democracia tiene como piedra angular la consolidación de esas fuerzas políticas que intervienen en los debates electorales en la procura de “administrar” el poder.

Y era lo que, hasta hace poco, veníamos observando en los Estados Unidos de América con los dos partidos tradicionales: el Demócrata y el Republicano.

Nos referimos a “hasta hace poco” porque, tal parece, con el gobierno de Donald Trump ese “equilibrio” partidista podría estar llegando a su fin.

Por aquello que sigue cogiendo fuerza esa línea extrema con el liderazgo populista y al interior del Partido Republicano liderado por la bestia; lo que a la postre podría estarse fraguando un tercer partido “Trumpista” en USA.

Lo anterior nos lleva, buscando el contexto, a comparar los dos sistemas electorales en Colombia y en Estados Unidos.

LOS SISTEMAS ELECTORALES

El sistema electoral en Colombia es pluripartidista, establecido en la constitución de 1991 y reformado en el 2003, hoy con más de doce partidos políticos – la mayoría con el propósito de otorgar avales, a cambio de una gruesa suma de dinero. Algunas en su funcionamiento convertidas, desde el pasado, en empresas criminales – los cuales, se cree, “cuentan con una personería jurídica por cuatro años en caso que algún candidato logre un escaño en alguna de las partes del legislativo”.   

El sistema electoral en Estados Unidos es bipartidista, “Durante las elecciones generales, los estadounidenses votan por el presidente en los centros de votación, pero la suma total del voto popular no lo determina el ganador. En las elecciones presidenciales el ganador se decide con el colegio electoral”.

Lo que hoy queremos señalar es que ese ciclo electoral estadounidense arranca con el proceso de las primarias que tiene que ver con la elección de los candidatos presidenciales, es un sistema complejo, en el que cada uno de los partidos está conformado por comités nacionales.

Que a través de las elecciones primarias cada aspirante por su partido según la votación obtenida obtiene un número de delegados; entonces el precandidato que obtenga el mayor número de delegados por partido asegura su nominación en la convención nacional de cada partido.

De la cual será elegido para enfrentarse al candidato del otro partido para así competir por la presidencia de los Estados Unidos de América.   

Si bien es cierto tiene sus fallas especialmente por la forma como funciona – léase sujeto a manipulación por la élite de turno - el colegio electoral, y es sobre lo que ya han pensado revisar, el sistema binario es el más utilizado alrededor del mundo.

Ya que al final el elector vota por uno, de dos, y el candidato que reciba el mayor número de votos gana las elecciones, aunque no obtenga la mayoría absoluta; y ese fue el caso Donald Trump – Hillary Clinton en el 2016.

LOS DESAFIOS DEL ELECTOR PRIMARIO

Entrando en materia, guardadas las proporciones y las diferencias en los dos sistemas electorales antes mencionados, parte de las elecciones a realizarse el siguiente domingo 13 de marzo enfrentarán varios retos o desafíos para el sufragante.

Sin embargo, para comenzar la reflexión de hoy es necesario, según nuestro criterio, subrayar esos “desafíos” que va a enfrentar el ciudadano del común en especial los “primíparos votantes” y el adulto mayor.

Para enfrentarlos, con éxito, los principales beneficiarios es decir los candidatos deben exigir - en esta semana, que mañana comienza, de preparación - a sus cuadros directivos y coordinadores de desarrollar con cada uno de los tarjetones, que les interese, la suficiente pedagogía electoral.

Pero en general, lo que  en realidad sucede, el ciudadano que ha última hora decide acudir a su mesa asignada en el centro de votación definido; una vez haya vencido el miedo escénico que en algunos produce la decisión de acudir a las urnas para votar por su precandidato preferido; insistimos enfrentará los siguientes retos.

Estos son los retos… El primero y más importante de todos es SALIR MUY TEMPRANO A VOTAR…  

Los retos de tipo logístico son: Los jurados de votación tendrán a disposición del elector primario nueve (9) tarjetones: Dos para Senado, Tres para Cámara que incluye la circunscripción indígena y afro, uno para las Curules de Paz y tres para consultas presidenciales.       

La otra limitante es que no existe la foto que identifique al candidato, solo el número, lo que para algunos observadores será como diligenciar la cartilla de los exámenes del Icfes… Es decir, la decisión final dependerá de la suerte, no del alumno, sino del candidato.

LAS CONSULTAS QUE HACEN LAS VECES DE PRIMARIAS

Lo primero que concluimos al respeto, basados en el concepto de transparencia que involucra a su vez lo práctico, ágil y seguro; lo correcto – léase: bueno, bonito y barato – ¿Negocio de la Registraduría Nacional del Estado Civil o de quién? y deseable hubiera sido en un mismo tarjetón estuvieran incluidas las tres consultas, donde cada precandidato apareciera con la foto y el logo/número respectivo.

Lo anterior para evitar, al momento de diligenciar y depositar el voto, la esperada confusión por parte del elector primario ya que al momento de solicitar los tarjetones, estos debieron haber sido diseñados, en algunos casos, a prueba de niños distraídos.    

¿PETRO PRESIDENTE, UN SOFISMA DE DISTRACCIÓN?

Más allá que en todos los medios de comunicación hablados, escritos y virtuales se dé por hecho que el próximo presidente de los colombianos, si hoy se realizaran las votaciones estaría en el cerebro extremista, y las manos, de Gustavo Petro Urrego.

Lo anterior se basa en las múltiples encuestas contratadas por los principales medios de comunicación con empresas dedicadas a ese, siempre, lucrativo negocio, que a su vez es financiado por el gran capital, léase Gilinsky y Sarmiento Angulo entre otros.

Como en el pasado, cuando no aciertan y la evidencia es abrumadora, el que más paga por las encuestas frente a ese resultado final que no era el esperado, objeto del contrato y derivado de la reacción frente al escepticismo de opinión pública en general. Las empresas encuestadoras simplemente cambian o suprimen una parte del nombre casi siempre del socio que más involucrado está el fracaso.

Lo que siempre deja un tufillo de duda razonable sobre la efectividad de esas encuestadoras y de la veracidad, basada en hechos probables, de sus resultados.

A propósito de hechos probables, hay que reconocer que casi 10 millones de posibles electores, de los 21 millones que se encuentran en situación de pobreza, y como no tienen nada que perder desde lo económico y/o social; aparte que políticamente se aferran a esa nueva oportunidad “de cambio”; se estima lo harán por “el cacas”.

Lo que sorprende, por la respuesta, es cuando a esa horda de simpatizantes, desinformados y analfabetos políticamente, la mayoría fanáticos – no leer borregos - se les pregunta ¿Y si Petro resulta un fraude y los traiciona y el nuevo presidente convierte al país en una filial o agencia de la República Bolivariana de Venezuela?

La demoledora respuesta es “Por lo menos lo intentamos y si es posible lo castigamos en las urnas dentro de 12 años”. ¿No cree usted, atento y respetado lector, que es desconcertante esa pueril respuesta?  

Lejos de comprender, la horda fanática, lo que está verdaderamente en juego es el Estado de derecho, la Ley Común, la autodeterminación, la libertad de expresión y de la información, entre otras características sobresalientes de la democracia: Ya que en ese probable escenario político estaríamos transitando el sendero de una dictadura.

REFLEXIONES SOBRE LOS POSIBLES RESULTADOS DE LAS CONSULTAS

Por el Pacto Histórico es indudable que el “elegido” será Gustavo Petro Urrego, seguido de Camilo Romero y Alfredo Saade; de hecho, esperaríamos que Francia Márquez ocupara el segundo puesto en votación, pero creemos, a riesgo de equivocarnos, que así funcionan las estructuras del poder así sea en el dominio de Petro.

Por la Coalición de la Esperanza existen dudas razonables, y nuestra reflexión tiene que ver con lo que creemos, y desde nuestra perspectiva, debería ser lo mejor para la democracia.

Los más opcionado sería Sergio Fajardo y Alejandro Gaviria, sin perder de vista a Juan Manuel Galán; el primero y el último han dejado claro que no aceptarán maquinarias políticas.

De salir airoso Sergio Fajardo, siendo un buen candidato – al que un amplio sector de la opinión lo califica como tibio - perdería el apoyo del Partido Liberal Colombiano porque los dirigentes de esa colectividad no desean saber nada del exalcalde y exgobernador de Antioquia.

Con el que, dicho sea de paso, se adelantan investigaciones en su contra cuando desempeñaba esos cargos públicos… Aunque toda persona tiene el derecho a “ser considerada y tratada como inocente hasta tanto no se demuestre lo contrario y sea declarada culpable mediante sentencia ejecutoria…”  

De otro lado de resultar elegido en la consulta, Alejandro Gaviria Uribe, es probable que la mirada del expresidente Cesar Augusto Gaviria Trujillo ya no sea para “El cacas” sino para éste.

LAS PINCELADAS PARA TERMINAR

Al final de la encrucijada, es nuestro criterio y no del expresidente Álvaro Uribe Vélez que, en honor a la verdad, no se ha manifestado directamente al respecto; es probable que un sector del Centro Democrático apoye en la recta final a Gaviria Uribe.   

Por la Coalición Equipo por Colombia, insistimos es nuestro criterio, el más opcionado sería Federico Gutiérrez, seguido de Enrique Peñalosa y sin descartar a David Barguil.

Que, tal parece, éste último fue uno de los congresistas que le dio el visto bueno a la reforma tributaria que movilizó a todo un país en señal de protesta, por lo aberrante de la iniciativa y en contra del pueblo colombiano, pero en especial de la clase media, emprendedora y trabajadora.

El caso del todo poderoso, Alejandro Char, pesa sobre sus hombros, en el imaginario colectivo, el escandalo desatado por las declaraciones de la exparlamentaria Aida Merlano Rebolledo, protegida del régimen venezolano aparentemente aliado de Petro, sobre la existencia de una sofisticada empresa criminal dedicada a la compra de votos en la costa atlántica. Lo que lo haría vulnerable por las averiguaciones que en ese sentido adelanta la justicia colombiana.

LA RECTA FINAL

En todos los casos el próximo 13 de marzo, número de la suerte para muchos, paquete en el que nos incluimos, quedaran definidos los cuatro candidatos que tienen la mayor opción de aspirar al solio de Bolívar: Colombia Humana, Coalición de la Esperanza, Equipo por Colombia más el Centro Democrático.

Insistiendo que en esencia, visto desde lo ideológico y programático, siguen enfrentados, por el poder, Liberales y Conservadores; esperando que, en el momento decisivo, de darse la segunda vuelta, se imponga para bien de la democracia el pensamiento Liberal Progresista.

Igual se espera, insistimos para el bien de la democracia, e independiente si para algunos pareciere extraño, el candidato Enrique Gómez Martínez pondrá sus cientos de miles de ladrillos para contener la avalancha del Socialismo del Siglo XXI.

LA ÚLTIMA REVELACIÓN

Créanos, dejamos para el final… La más reciente revelación, por lo demás apocalíptica, en la que en tonos claros y oscuros y con el infierno de Dante como fondo de ésta, por venir, bella, voluptuosa y agitada tragicomedia.

En la que el gran capital – léase Gilinsky y Sarmiento Angulo, más los otros que no alcanzamos a reconocer - habían decidido ya no en la playa alicantina de Benidorm, talvez en la ya no tan neutral Suiza, y al tiempo de atomizar las elecciones para parlamento, paso previo de los comicios para presidencia; el haber “elegido” a Petro presidente. Bajo la premisa que, como siempre, lo podrán controlar a sus antojos. Amanecerá y veremos.