En lo primero
que debemos de reflexionar, sobre el asunto que nos ocupa hoy, es frente a la
siguiente pregunta ¿Cuál es la reacción de una fiera cuando se siente
amenazada?
FIERA
HERIDA
Lo primero que
se nos ocurre es que dicha reacción tiene que ver con su instinto de
supervivencia; en todos los casos frente al temor o miedo, el animal dependiendo de su naturaleza predadora o no, ataca o huye.
Lo mismo sucede en esta sociedad corrupta, hasta el tuétano, que apenas está aprendiendo de esta nueva era digital; donde ya no es en el Coliseo Romano lugar en el que se enfrentaban gladiadores entre sí y, a su vez, con bestias indomables.
Que tenía como
propósito del emperador, de turno, y de sus senadores al igual que de los
patricios y algunos plebeyos enriquecidos; entretener al resto de plebeyos,
esclavos y libertos para así garantizar la estabilidad política del imperio.
Hoy hablamos no del
coliseo, sino de las redes sociales como lugar donde confluyen múltiples
intereses; que en esencia sirven de termómetro que mide hoy la actual
crisis política, económica y social en la que se debate nuestra enclenque
democracia.
Con mayor razón en estos tiempos de pandemia y de elecciones parlamentarias y presidenciales; tal es el estado en que se encuentra la patria que, sin ser el tiempo para movilizar conciencias hacia un debate político con altura; digna de una democracia.
Ya
estamos comprometidos en campaña presidencial; incluso faltando uno de los posibles candidatos que tenga la suficiente fuerza política para llegar a la segunda vuelta electoral.
DISCURSO
POPULISTA, MANIQUEO E INCENDIARIO
Donde se
comprueba una vez más que el debate programático y de ideas ha dado paso al
discurso populista, maniqueo e incendiario; convirtiéndose en el argumento central para
ahondar la polarización; donde lo que está en juego no es la
presidencia de la República de Colombia; sino la misma democracia
participativa.
Un país
polarizado entre las dos extremas, cuyas figuras más visibles Álvaro Uribe
Vélez, su bancada de gobierno y sus $impatizantes; que reiteradamente se niegan reconocer que, desde el anterior gobierno, habían quedado las puertas abiertas para avanzar en la pacificación del país.
HONRAR
EL ACUERDO DE PAZ
Nos referimos a ese
acuerdo de paz, imperfecto pero nacido vivo, que supuestamente era el camino a recorrer, en éste gobierno de Duque, donde la
verdad, justicia, reparación y no repetición era la vía indicada para corregir las
enormes brechas sociales que hacen del país uno de los más desiguales en el
mundo.
Y en el otro
extremo, el excombatiente, Gustavo Petro Urrego que, tal parece, por su
ascendencia italiana; lo hace sentirse un ser superior a todos los criollos
colombianos y poseedor de la verdad socialista revelada.
Lo que claramente se observa en su última y muy
bien calculada intervención en la red social Twitter – léase cloaca virtual -
“Las vacunas no sirven para el virus Covid-delta, según primeras
investigaciones”.
Como era lo
esperado, para él, generó un estallido político que llamó la atención de 26
millones de colombianos; cifra que corresponde aproximadamente al total de
colombianos que acuden a las urnas cada dos o cuatro años.
CONFUNDE,
DIVIDE Y ATACA
Lanzada la
carnada, los que la mordieron quedaron atrapados en ella, ya que desconocían que
allí estaba el anzuelo que buscaba llamar la atención de un país
subdesarrollado, o tal vez por eso, y empobrecido, no sólo a causa de la
pandemia; sino porque se estima que cada año se pierden en corrupción 50
billones de pesos.
Sin contar con
el dinero que se despilfarra y se legaliza en favor de unos pocos en el
Honorable Congreso de la República; trámites legales que tienen que ver con las
reformas llámense: Tributaria, Pensional, laboral, de la salud y a la justicia
entre otras.
Quedando siempre
por fuera del radar…La más urgente e importante: una profunda reforma al modelo
educativo que durante los últimos 50 años ha formado borregos; que en época de
elecciones caminan como zombis para exaltar a centenares de vampiros que, una
vez probada la sangre del poder, no dan marcha atrás.
¿PETRO
FASCISTA?
Regresando a
Petro en cuya carrera política lleva ya 41 años, le falta mucho para
pensionarse por edad; en su mejor época, aunque fue un mal alcalde, se le
percibía como un estadista.
Hoy para suerte
de muchos cayendo en el abismo de la demagogia, del populismo que siempre lleva
al, confundiendo a muchos, fascismo como fase intermedia hacia el
totalitarismo.
Lo anterior es
lo que no han podido comprender algunos de sus fieles escuderos que fueron
adoctrinados políticamente en la romántica izquierda entre los años 60´s hasta los
90´s con la famosa “Lucha de clases”.
Hoy interpretada como vandalismo y terrorismo - pasada generación que tarde comprendió que el recurso de las armas, empuñadas por los valientes, no era el camino correcto; siendo mejor el escribir... "Tengo pluma por espada".
Hoy, sin ideario político, se ha convertido en inexcusable vandalismo que es financiado en primera línea; censurada intervención que es reconocida, como autor material, por el mismo Gustavo Bolívar; segundo
al mando de Colombia Humana. ¿Será humana esa actuación?
CONFUNDE
El Twitter del “cacas”,
hay que reconocer, fue una jugada casi que perfecta que buscaba, lográndolo,
llamar la atención hacia él; en un nuevo escenario político donde se está
estructurando, en favor de la democracia, una propuesta de centro moderado que de
darse seguramente llegaría al poder.
Lo que más llama
la atención de su última jugada es que para sorpresa de muchos – esperada por
unos pocos – en su actuar echó mano de la estrategia polarizante e insurreccional
que le ha dado muy buenos resultados a Donald Trump, en el pasado a Hugo Chávez
Frías, qepd, y recientemente a Nicolás Maduro; tal parece, este último, su
after ego.
Como lo son
también otros dignos representantes del populismo latinoamericano: Rafael
Correa, Evo Morales y Cristina Fernández entre otros; amparados en una falsa
pretensión democrática, cuando solo buscaban, mediante la demolición
institucional, empotrarse por décadas en el poder.
DE
MANIPULADOR POPULISTA A POSAR COMO INTELECTUAL
Con su más
reciente apoyo en favor de Pablo Iglesias Torreón, finalmente derrotado
políticamente en España, buscaba internacionalizar ese claro pensamiento
socialista en su combate político apoyado en esa filosofía marxista-leninista.
Al tiempo de
pretender posar como intelectual y de la manipulación a través de un lenguaje hostil, sembrando
incertidumbre, procurando el avance del populismo al mejor estilo Trumpista antivacunas y que hoy sigue haciendo estragos en USA.
Muy a pesar de los esfuerzos de ese liberal progresista, hoy, presidente de los Estados Unidos de América, Joe Biden y de su vicepresidenta Kamala Harris.
Surge entonces
la pregunta, que ya tiene parte de la respuesta un par de párrafos atrás, ¿Por
qué acude Petro a ese irresponsable lenguaje populista y de desinformación
frente a la emergencia sanitaria poniendo en riesgo millones de vidas?
La respuesta es
sencilla siente temor o mejor miedo… Pero antes de entrar en este detalle,
ayudémonos con apartes de un artículo de Bertrand Russell denominado “Principios
de Reconstrucción Social”. Londres, 1916.
“El ser humano
teme al pensamiento más de lo que teme a cualquier otra cosa del mundo; más que
la ruina, incluso más que a la muerte”.
“El pensamiento
es subversivo y revolucionario, destructivo y terrible. El pensamiento es
despiadado con los privilegios, las instituciones establecidas y las costumbres
cómodas; el pensamiento es anárquico y fuera de la ley, indiferente a la
autoridad, descuidado con la sabiduría del pasado”.
“Es mejor que
los seres humanos sean estúpidos, amorfos y tiránicos antes que sus pensamientos
sean libres. Puesto que, si sus pensamientos fueran libres, seguramente no
pensarían como nosotros. Y este desastre debe de evitarse a toda costa”.
LAS
DISIDENCIAS
Petro que ve
cercano ese temor de perder de nuevo la presidencia; por aquello, en principio,
de sus principales disidencias – léase Claudia López Hernández y Jorge Enrique
Robledo Castillo – y de la derrota reciente de Gustavo Bolívar Maestre en la
vicepresidencia del Congreso con el voto en blanco que significó rechazo, a
pesar de los acuerdos bipartidistas.
Aparte de políticos,
que siguen allí, seguramente ya incomodos para el dirigente de la extrema
izquierda; en especial por ese extenso prontuario como oportunistas y acomodados
que adoran la mermelada; como lo son Armando Benedetti y Roy Hernando Barreras
Montealegre.
DIVIDE
Y ATACA
La clave está en
el viejo truco de la estrategia de: confunde, divide y ataca que se encuentra
en los viejos manuales de contrainsurgencia; y que bien debe haber releído, no
en su antigua vida clandestina, en la comodidad de su residencia.
Contrario a la
labor de inteligencia – léase ejército de simpatizantes y colaboradores civiles
del Estado – que dicen estar en todas partes y no están en ninguna; y tan solo
se dejar ver como celebridades de cuadra y barrio, esporádicamente, cuando buscan
salir en la foto o presentar un informe; al mejor estilo de los politiqueros de
turno.
Petro Urrego en su actuar hoy se muestra, como pocos, aprovechando maquiavélicamente una realidad política
económica y social que contrario a su propósito; necesita el llamado a la confianza y a la solidaridad con los vulnerables.
Todo lo contrario sigue invitando al caos, la desinformación y la destrucción; y en su último Twitter, actuando
en contra de la salud pública de los colombianos, solo buscando su beneficio político.
Totalmente
distante de su anterior discurso programático e ideológico, por aquello que en
esencia todo el mundo, en especial sus opositores, conoce muy bien que es lo
que realmente va hacer si llegaré a la Presidencia de la República.
Entre otras obsesiones
tomar el control de la banca; y en una primera fase de algunos sectores productores
de bienes y servicios, hasta redactar una nueva carta magna, superando la ambición
de Daniel Ortega.
LA
FRASE LAPIDARIA
Finalmente citamos
una de sus frases, según él “proféticas” que lo resume todo su pensamiento reformista radical. Palabras más palabras menos…
“Mi proyecto de país necesita varios periodos de gobierno” surge la pregunta
final ¿Hacia una nueva dictadura del proletariado?
El grave problema para el país y los que saben leer, entre líneas, sus discursos populistas es
su total incoherencia entre lo que piensa, dice y hace. Amanecerá y veremos.