Antes de entrar en materia;
aprovecho la oportunidad para agradecer a todas las personas que advirtieron sobre
la ausencia - durante un poco más de un mes - de mis artículos en el blogs
COSAS DE CARTAGO Y EL NORTE DEL VALLE y/o en la columna de opinión en el diario
virtual ciudadregion.com. Gracias por la deferencia.
Ausencia que obedeció a quebrantos
de salud como consecuencia de un accidente de tránsito en moto; pero en
especial por la imposibilidad del acceso a los recursos de la internet, en
forma segura.
Como el tiempo lo decanta
todo - fortalece el espíritu y cura todo tipo de heridas – en convalecencia ese despertar, casi que kafkiano, al inicio de
cada nuevo día me sirvió para confirmar que escribir se convierte en una
catarsis que tiende puentes para comunicarse consigo mismo, con la ciudad, con el
nuevo país camino del postconflicto; cotidianidad que adquiere por fortuna
nuevas y esperanzadoras perspectivas.
Por fin, dando comienzo al
asunto que nos ocupa hoy, lo primero que es menester anotar; es el buen balance
de la gestión presentado por el alcalde de la ciudad de Cartago en el Norte del
Valle, el abogado y escritor Carlos Andrés Londoño Zabala.
En ese informe de gestión
deja claro sus iniciativas y las obras realizadas durante su primer año de
gobierno. Compromisos adquiridos durante
de su campaña y que con el tiempo se han convertido en ejecutorias; cumpliendo,
según sus tiempos, lo prometido.
De hecho consideramos que la
principal gestión realizada y vista desde el enfoque fiscal y financiero, fue empezar
a atender una deuda pública que al primero de enero de 2016 ascendía a un poco
más de $26.000 millones.
Situación que nos hace
recordar, la vigencia fiscal 2001-2003 cuando el entonces alcalde, el político,
Luis Carlos Restrepo Orozco, se acogió a la ley 550 de 1999 o de insolvencia
económica; y también se dedicó a cancelar una deuda que ascendía
aproximadamente a $16.000 millones de pesos; lo que limitó la inversión en
infraestructura social durante su administración.
En el informe de gestión, finalizando el año, es notable el esfuerzo, de Londoño Zabala, en
mejorar la gestión fiscal - recuperación de cartera, fiscalización, depuración
de bases de datos, entrega masiva de facturación y como contraparte generando
austeridad en el gasto público (aplicando la regla fiscal) - mejorando la cultura del pago del
contribuyente; todo con el firme propósito de devolverle al municipio su
viabilidad financiera. ¿Logrará mejorar la categoría del municipio hacia el
2019?
Resultado de lo anterior - recordemos que como ordenador del gasto, y dados los compromisos
adquiridos desde el pasado con la banca, no tenía otra opción que atender, como
prioridad, el abono a esa deuda pública e independiente de las limitaciones en
la obtención de los flujos de caja y efectivo; canceló, durante el primer año
de gobierno, un poco más de $5.493 millones de pesos (capital más intereses).
Como consecuencia de ese riguroso
ejercicio financiero no le fue posible adelantar inversiones en materia de infraestructura
(Formación bruta de capital) que apuntara a mejorar la competitividad del ente
territorial y por supuesto la calidad de vida de los cartagüeños.
Como el informe de gestión
es extenso y se encuentra acreditado por los comerciantes, empresarios,
gremios, la academia, los medios de comunicación y en general por la opinión
pública de la ciudad y la región.
Hoy realizaremos un breve
resumen de lo allí consignado, que no son otra cosa que la materialización de
iniciativas, en el día a día, confirmando lo consignado en su Programa de Gobierno
y en el Plan de Desarrollo - Todos por Cartago.
Desde la planificación se
propuso, dar los primeros pasos, mejorar la movilidad, disminuir la
accidentabilidad y articular la conectividad de la ciudad con la región; como
lo fue la recuperación y el mejoramiento de la malla vial, acciones que se
resumen en 257 baches intervenidos en 62 cuadras que representan 6.526 metros
cuadrados de carpeta asfáltica.
Así como el mejoramiento de
la capa de rodadura desde la intercesión de San Vicente hacia la carrera 4 y por
esta hasta la calle octava con 1.050
metros lineales intervenidos en nueve cuadras.
Acertada, y requerida desde hace
décadas, fue la conversión de la peatonal de la calle 14 entre carreras quinta
y sexta en una vía semivehicular lo que mejora la movilidad y el adecuado uso
del espacio público en el centro de la ciudad.
También fue la adecuación y remodelación
de la peatonal de la calle 13 entre 4 y
5 y la instalación de luminarias que resaltan la arquitectura de la Catedral de
Nuestra Señora del Carmen y la Casa del Virrey, favoreciendo el desarrollo del
turismo religioso e histórico.
Temas de trascendental importancia,
como inversión social son la educación y
la Salud que serán tratados en capítulos aparte por lo extensos y por los
logros alcanzados y su impacto en la cultura ciudadana.
Importante resaltar el programa
de Escuelas Populares del Deporte, dándole una nueva oportunidad a la niñez,
infancia, adolescencia y juventudes en la búsqueda de talentos deportivos; con
el apoyo y dirección de 15 monitores para diferentes disciplinas deportivas.
Así como la realización de la
copa CBO BMX, festival regional BMX y los Juegos Deportivos y Recreativos del
Adulto Mayor. Todos por Cartago.
En el sector del medio
ambiente y el desarrollo rural, y con buena acogida por parte de la población
rural; fue la implementación de los Concejos Municipales de Desarrollo Rural CMDR, así como los Programas
de Seguridad Alimentaria (Productos pancoger) y la celebración del Día del Campesino
en el Corregimiento de Piedras de Moler.
Decidido apoyo a programas
de seguridad ciudadana, SPA, la recuperación del Ecoparque de la Salud el Samán;
así como el inicio del proyecto “Cartago un Jardín”, que busca el embellecimiento
de las zonas verdes, separadores y parques de la ciudad cuyo objetivo es fomentar
el turismo ecológico.
Lo anterior refleja que desde
el comienzo de su campaña y ya como administrador, el abogado y escritor, se
interesó por cambiar la imagen de la ciudad; en especial desde el punto de
vista de la seguridad y convivencia ciudadana; fue así como, con el apoyo de
las autoridades locales, logro disminuir considerablemente los homicidios - con
corte al 30 de noviembre - en un 33% frente al 2015.
Siempre ha insistido en temas
que giran alrededor de lograr una imagen de ciudad limpia, organizada y moderna:
en especial el programa “todos por mi parque” que buscan mejorar la estética de la ciudad
hacerla acogedora para propios y extraños; en este orden de ideas, el alcalde,
busca una ciudad anclada en el turismo y la cultura.
Frente al reto de mejorar la
seguridad vial, desde Tránsito y Transporte, continuaron las iniciativas
entorno a la movilidad y la recuperación del espacio público; en el 2016 se
realizaron 562 operativos pedagógicos tendientes al uso adecuado del espacio público donde se
destacan: prohibido parquear, control de bahías y del transporte informal,
entre otros.
De igual importancia fue el
Plan de Demarcación en 226 cuadras, parques y entidades que equivalen a 700
metros de aplicación de línea amarilla: como señales de pare, prohibido
parquear, cebras y velocidades máximas entre otras señalizaciones; así como el
Programa de mantenimiento correctivo y preventivo a los semáforos de la ciudad.
Desde la gestión social y
por iniciativa de la gestora social, la abogada, Jesusita Zabala de Londoño, se
adelantaron brigadas sociales en diferentes barrios y corregimientos campañas
contra el trabajo, maltrato y la explotación sexual infantil; prevención en el consumo
de sustancias sicoactivas, violencia intrafamiliar y de género, disminución de embarazos
en adolescentes, correcto uso de la pólvora y jornadas de vacunación entre
otros.
De importancia fue el apoyo
a las Juntas de Acción Comunal, JAC, sin perder de vista a las Juntas
Administradoras Locales, JAL, lo ideal sería que contaran con presupuesto
participativo comunitario; tal parece la limitante es falta de liquidez, vía
recursos propios, para atender estos temas de alto impacto social. Insistimos que
el servicio a la deuda afecta este tipo de inversiones.
Se continuó con, directriz
presidencial, el programa “Más familias en acción”, temas como equidad de
género, niñez, infancia, adolescencia y juventudes, mediante el programa “Mi
municipio, Territorio de Juego”, la atención a la población pobre y vulnerable tuvieron
especial atención; continuando con el apoyo a la gestión realizada por la Casa
de Justicia y la realización de la “Cartagotón”
pro-damnificados del incendio de Bellavista.
Durante el 2017, Londoño
Zabala, se espera seguirá generando espacios donde se promueva el arte y la
cultura, programas como los talleres para niños escritores, plan de lectura al
parque y el fomento al uso de la biblioteca; cuyo propósito aparte de alejarlos
del ocio y la tecnología de punta; favorece el desarrollo intelectual de niñas
y niños.
Como apoyo a los artistas
locales, se le dio impulso a través de la realización del “parquearte” diseñado
para visibilizar y enaltecer el arte y la cultura local; así como los “Semilleros artísticos por la paz” que
sirven de escenarios para identificar y apoyar talentos en dibujo, pintura,
manualidades, artesanías, tejido, bordados, danza, teatro, música, banda,
escuela y folclor; en el 2016 participaron 4.050 personas de manera gratuita.
También lo fue el apoyo a
eventos como: Encuentro Nacional de Familias que Cantan, Encuentro Pedro
Morales Pino, Celebra la Música, Encuentro Mujeres Poetas y Salsa y Tambor al
Parque.
Importante resaltar el
monumento a la bordadora, una obra, que sirve de reconocimiento y apoyo a la
larga labor del maestro Carlos Tulio Suarez Gutiérrez.
Por limitantes de espacio
quedaron por mencionar y/o detallar muchas iniciativas y obras durante el
primer año de gobierno; en general y en su expresión más simple buscó, Londoño
Zabala, mejorar la estética, imagen y la seguridad en la ciudad.
En este nuevo año, como el
tiempo va de prisa, y lo que resta de su gobierno, seguramente continuará con
ese ejercicio de planificación de cara a proyectos de importancia estratégica -
que requieren de musculo financiero para ser viables - ya que el ciudadano del
común espera que por lo menos uno se convierta en una realidad; lo que
requerirá del componente ya sea concesiones o alianzas público privadas.
Amanecerá y veremos.
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