Estudios han demostrado que
los factores socioeconómicos que dieron origen al mototaxismo, son entre otros
los bajos niveles de escolaridad de la población, la falta de oportunidades
expresada en el desempleo y la pobreza de la región; además de costoso y pésimo
servicio prestado por parte de las empresas vinculadas al sector transporte.
Empecemos formulándonos la
primera pregunta... ¿Es la implementación del taxímetro la mejor solución; para
aparentemente contrarrestar el creciente fenómeno, de mercado del transporte público,
denominado mototaxismo? O por el contrario tiene otra connotación diferente a
la de mejorar el nivel de ocupación de los taxis, disminuyendo el valor de la
carrera e intentando aumentar, como discurso político, el ingreso del taxista.
Quedó claro en la
presentación, en la mañana del día anterior, ante el Honorable Concejo
Municipal HCM - y como única fuente de información disponible para el análisis
- por parte del representante de dicho gremio, el comerciante Nelson Gutiérrez
Vélez; el grado de complejidad que rodea, hoy día, el manejo del negocio del
transporte público principalmente de microbuses y taxis en la Ciudad de Cartago
en el Norte del Valle.
Y no es para menos; ya que
si intentamos organizar la información suministrada, nos encontramos que entran
en juego muchas variables, suponemos entre otras:
Ausencia de control oficial,
sobre el adecuado uso y señalización, por parte de la oferta de transporte
intermunicipal - buses, busetas y
microbuses - en los sitos autorizados, al momento recoger y dejar pasajeros, en
algunos casos sobrecupo, en las diferentes frecuencias y rutas - reconocemos que
ha aumentado, para bien del usuario, la frecuencia de las mismas que llegan y
salen del centro. Lo que posiblemente haya influido en la mejora del servicio
Intentan relacionar directamente
el caos en la regulación (Por parte del Estado) y administración (Empresario)
de este servicio en especial busetas y
microbuses - cuando manifiesta “…que el servicio intermunicipal riega (sic) los
pasajeros…” - con el bajo nivel de
ocupación de los taxis. Siendo este solo un efecto colateral mínimo.
Reconocen que los estudios
económicos, sobre la ciudad, indican una baja capacidad de compra, “… el estudio
económico es bajo…” por parte del usuario del taxi; dejando claro, para
algunos, que el consumidor del servicio de taxi es diferente al del microbús.
Reconocen, cuando afirman
que es demasiado baja la remuneración del taxista; hábilmente ignoran la sobreoferta
de este servicio, un poco más de 633 móviles.
Salvo se registre en la
información documentada y por entregar al HCM, tampoco se menciona el rebusque,
de estos, a través de contratos mensuales para transportar clientes desde y hacia su sitio de trabajo o para
tramites personales, amas de casa, pensionados, estudiantes entre otros;
mejorando de esta manera el ingreso al final del mes.
Adicionalmente ya hace
carrera en la ciudad, ofrecer el servicio de taxi por puestos (taxi-colectivo)
a $1.000.oo el puesto.
Queda muy claro, en la
presentación, que reconocen la variable precio como la que más afecta la demanda del servicio; que oscila entre
$3.300.oo pasando por $4.300.oo y en algunos casos hasta $9.000.oo por carrera
en la ciudad.
Tampoco podemos perder de
vista, que en los múltiples estudios realizados, en la costa Caribe, sobre esa
nueva oferta en el mercado del transporte - el Mototaxismo – siempre se
concluye que el primer afectado es el transporte realizado a través de buses,
busetas y microbuses - ya que atienden al mismo tipo de usuario, generalmente
el desempleado, y que acude al régimen subsidiado para la satisfacción de sus
necesidades básicas.
Basados en la limitada
información suministrada, debido al poco tiempo que tuvo disponible, se concluye
que los estudios se basaron en los recorridos cortos (representados en el 86%
de los servicios solicitados de taxi) y
los recorridos largos, más de tres kilómetros, que representan el restante 14%
del estudio.
Entendiéndose por recorridos
cortos aquellos desplazamientos menores a 3 kilómetros y de estos el 55%
corresponde a trayectos menores a 2 kilómetros. Ésta unidad de medida, sirvió
como base del calculo, para determinar el valor de la carrera mínima que
quedaría en $2.500.oo pesos. A saber:
Sin tener claro como y
porqué se estimó ese mínimo recorrido que equivale, según lo expuesto por
Gutiérrez Vélez, a 1.846 metros; lo que nos lleva a la estimación de la
constante, para formular la ecuación, que quedó determinado en el factor de
recorrido (medido por el taxímetro) y que equivale a 75 metros, por el que el
taxímetro lo liquida por $65 pesos.
Lo anterior significa que si
dividimos 1.846 metros (casi 2 kilómetros) por 75 metros, nos arroja un factor
equivalente a 24.61 recorridos por kilometro y si este valor lo multiplicamos
por $65.oo pesos nos arroja aproximadamente $1.600.oo que equivale al valor del
recorrido mínimo; más el banderazo de $900.oo pesos nos da como resultado el
valor de la carrera mínima de $2.500.oo pesos; que equivalen a $800.oo menos
que el cobro actual de $3.300.oo
Surge entonces la siguiente
pregunta ¿Se convierte en competitiva la rebaja de $800.oo en esa carrera mínima?
que equivale prácticamente al 55% de los servicios de taxi en ciudad. Frente a
los $1.000.oo menos que cobra el mototaxista, sobre la nueva tarifa, a regir a
partir del 1 de Diciembre del presente año, de $2.500.oo.
Entonces la clave esta en el
banderazo, estimado en $900.oo surgen las siguientes preguntas, ¿Qué factores se
tuvo en la cuenta para determinar dicha cifra? ¿O será el valor que determina
el punto de equilibrio de ese mercado? ¿O será el colchón de seguridad en la
rentabilidad de éste? De ser así ¿Porqué no $500.oo? y sacrificar un poco de
rentabilidad y ser mas competitivos.
Hagamos en mismo ejercicio
con la última cifra; entonces la rebaja seria de $1.200.oo lo que posiblemente
haría más atractivo el uso del servicio del taxi, sin olvidar que en éste nicho
del mercado – el usuario del taxi – es muy distinto al que utiliza diariamente
el colectivo.
El problema no es fácil de
resolver, sobre todo por el erróneo manejo político que se le está dando al
tema; sobre lo que si no cabe la menor duda es que la tarifa puede y tiene que bajar si desean ser competitivos frente a
la nueva competencia, ¿Que tal dejar la carrera mínima en $2.100.oo?
Finalmente, y tal como fue
diseñada la nueva tarifa de $2.500.oo queda claro que le entregan el 14% del resto
del mercado, servicios de más de 3 kilómetros, a la oferta creciente del mototaxismo.
Amanecerá y veremos.
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