EL NOMBRE DE LOS PROGRAMAS DE GOBIERNO

Ante la limitación de tiempo y espacio para abordar cada uno de los Programas de Gobierno de los 9 candidatos, y para simplificar las cosas solo abordaremos los candidatos más opcionados.

Lo primero que tenemos que tener presente es que la ciudad está sobre-diagnosticada, entonces nada nuevo han descubierto; solo cambia el estilo en el discurso, el cual está determinado por el tipo de estructuración del aspirante y la experiencia que tenga en el ejercicio de su profesión o compromiso con la comunidad de tiempo atrás.

Lo que se pretende hoy, comenzando semana, es valorar cual es la mejor la propuesta para enfrentar el atraso histórico en que se encuentra en Municipio de Cartago en el Norte del Valle.

Para allanar ese camino se hizo necesario observar dos aspectos fundamentales, primero el perfil de liderazgo del candidato y luego su propuesta; porque la experiencia nos a demostrado, en algunas ocasiones que el primero es muy bueno pero la propuesta es muy simplista o lo contrario; se busca el equilibrio entre el candidato y su propuesta.

Además en el pasado hemos encontrado que algunos Programas de Gobierno fueron elaborados por “contratistas” de otras ciudades y especializados en estos temas, es importante creer en lo nuestro; ojalá la historia no se haya repetido.

Sería irresponsable y sesgado en el análisis pretender desconocer que existen aspirantes con muy buenas propuestas, pero con escasa posibilidad de ser elegidos; razones pesan en contra de ellos; campañas tardías, carecen se una estructura solida en el sentido que no están rodeados de aspirantes al concejo que consoliden dicha opción de cambio.

Algunos son ilustres desconocidos, otros proyectan una imagen marcadamente excluyente que le impide acercarse a ese voto popular que siempre ha vivido alejado de los privilegios y comodidades, otros por el contrario se muestran timoratos en sus intenciones de generar buenas ideas y cambios sustanciales.

Son propuestas que pretenden llevar un mensaje político de solidaridad y cambio de actitud para con las clases menos favorecidas, pero su esfuerzo no logra trasmitirlo, ya que la aureola de solemnidad y abusando del prestigio personal los distancia de la propuesta popular.

Una cosa es interpretar la necesidad o la carencia de una comunidad, y otra es apropiarse verdaderamente de ella y proyectarla al pueblo; aquí los egos y los súper-egos se convierten en los peores enemigos de algunos candidatos. El candidato entra rápidamente en contradicción entre lo que dice y como lo dice.

El aprendiz de político debe de ver y vivir la necesidad del desprotegido, recordemos que las estadísticas solo interpretan una realidad compleja; el que “no ve”… nunca propondrá una solución de fondo al problema que aqueja a una comunidad.

Para apoyarnos en el análisis, los supuestos son los siguientes: el candidato debe de tener una amplia trayectoria en lo público a nivel local, y el suficiente carisma para lograr el fervor popular que despierte pasión en el ciudadano del común.

Tiene mucho peso que sean figuras públicas reconocidas a través del tiempo y el desinteresado servicio que le han prestado a su comunidad en general.

Tiene ventaja aquel que habiéndose desempeñado como funcionario público haya cumplido y siempre haya observado una actitud de servicio con humildad; y que nunca le haya cerrado las puertas al ciudadano,es decir que se haya comportado como un verdadero servidor público.

Si bien es cierto los votos provienen de todos los estratos socioeconómicos, para nuestro caso he llegado a la conclusión que quienes inclinan la balanza al momento de elegir alcalde y concejales, son los habitantes de las comunas, 1, 2, 3 y 7.

Por absurdo que parezca irónicamente son aquellas (las comunas) en las cuales los indicadores de pobreza y miseria se hacen sentir más; como la inseguridad, embarazos en menores de edad, violencia intrafamiliar, deserción escolar, consumo de sustancias psicoactivas, prostitución infantil, enfermedades de transmisión sexual, entre muchos otros flagelos difíciles de erradicar pero no imposibles de enfrentar.

La intención de hoy es promover el debate de ideas constructivas, basado en lo que cada uno de los candidatos haya consignado en su Programa de Gobierno y que más allá de pretender ser la Carta de Navegación del próximo gobierno; demuestre sentimientos de solidaridad por la ciudad que los vio nacer o que hace poco le abrió las puertas cuando era un total desconocido.

Empecemos por el principio y es el intentar descifrar que mensaje se quiso enviar al electorado cuando se definió el slogan de la campaña que generalmente es el nombre que recibe el programa de gobierno.

Para evitar suspicacias, abordaremos el tema, determinado por el orden alfabético de acuerdo al nombre del candidato.

El abogado Álvaro Carrillo decidió llamar su proyecto político “Cartago Moderna, Competitiva e Incluyente”. Una vez leído, dicho documento logra interpretar en una corta frase la visón y misión de su propuesta de gobierno.

Acierta totalmente en el sentido que logra balancear el papel que debe desempeñar como futuro gobernante, y así mismo interpretar la realidad, las oportunidades y las acciones a realizar para encontrar el camino que recorrerá su administración para lograr el objetivo del crecimiento y desarrollo sostenible con responsabilidad ambiental, frente a un mundo cada vez más globalizado que exige planificación a largo plazo y el ejercicio permanente de las destrezas de sus gobernantes. Dos puntos a su favor.

El Economista José de Jesús Villamil Quiroz, optó por el slogan de su campaña y nombre de su propuesta política “Somos Cartago”. Una vez leído, dicho documento no logra interpretar en esa frase la intención de su también bien elaborada propuesta de gobierno.

A pesar que el documento le apunta casi que a las mismas fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas que hacen parte del pasado, presente y futuro de nuestra ciudad, se desvía de lo fundamental para distraerse en los sentimientos personales del autor.

Se abstrae de la razón de ser de su propuesta y tal vez vencido por la necesidad de reconocimiento y a lo mejor guiado por un impulso ego centrista, no piensa en la visión y misión para el municipio; solo intenta ser reconocido como el futuro gobernante de su ciudad y al servicio de los cartagüeños.

Conclusión el nombre dado a su Programa de Gobierno no interpreta el contenido y las intenciones del documento político. No hay punto a su favor.

El administrador de empresas. Juan Eccehomo Caliman Pabón se decidió por “Por una Cartago Incluyente y de Oportunidades”. Una vez leído dicho documento también logra interpretar en una frase el sentir de sus colaboradores.

Deja sentir la necesidad de convertir a la ciudad en un proyecto regional donde todos tienen cabida, invita como los dos anteriores a un gobierno participativo donde todas las fuerzas vivas hagan el esfuerzo que les corresponde.

Es un documento mas liviano y lleno de generalidades que evoca más al pensamiento político de la colectividad que lo apoya y tal parece que carece de formulas concretas para lograr sacar del atraso al municipio de Cartago. Hay un punto a su favor.

Hasta aquí no hemos dicho absolutamente nada del espíritu de cada uno de los programas; si Dios me lo permite, la próxima semana intentaremos condensar las principales propuestas de gobierno de los tres candidatos con mayor opción de llegar al primer cargo del municipio y usted atento y respetado lector decidirá cual es la mejor propuesta. Por ahora gana más puntos el candidato liberal. Amanecerá y veremos.


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