Durante un poco
más de una década esta columna de opinión, blog, ha intentado interpretar el
acontecer económico, político y social de esta olvidada región Norte
vallecaucana.
Centrando la
atención en la ciudad de Cartago en el Norte del Valle por aquello que, entre
otras razones, es la localidad con el mayor indicador poblacional urbano; alertando sobre la rural que lentamente ha ido desapareciendo ya que sus moradores, ante la
baja calidad de vida, decidieron migrar en busca de mejores oportunidades.
En la mayoría de
los casos con un resultado totalmente contrario a lo esperado, derivado de esa obligada
iniciativa, ya que muchos solo han logrado aumentar los cinturones de pobreza y, porque
no decirlo, en algunas ocasiones miseria en la ciudad y en la región.
EL
SOL MÁS ALEGRE DE COLOMBIA
Algunos periodistas
y activistas en las redes sociales suelen denominarla como “La capital natural
del Norte del Valle” - nos quedamos con “la Cuna del Talento” o “el Sol más
alegre de Colombia” – descripción a la que nos oponemos por aquello que los
pergaminos o las distinciones no se autoproclaman y menos cuando no existen
pruebas para sustentarlo.
Para obtener ese
calificativo debe presentar resultados tangibles expresados en obras de
infraestructura social, y/o empresarial, que permitan que la ciudad sea
considerada como un polo de desarrollo y que a su vez atraiga constantemente inversión
nacional o internacional. Asunto que no sucede.
Para de esa manera, y cumpliendo otros requisitos como: eficiencia fiscal y administrativa, se
perfile como, eso esperamos, la Ciudad-Región Norte vallecaucana. Y para ello
requiere del total y permanente acompañamiento del Gobierno Departamental, la empresa privada y la academia y es
lo que no se ha podido articular.
INVERSIONES
GENERACIONALES
En relación con
lo anterior de nuevo vale la pena recordar una de las frases del presidente de
los Estados Unidos de América, Joe Biden, en una de sus reuniones con los presidentes de los paises
integrantes G7, pensando en la reactivación económica, de esas economías las más
industrializadas de Occidente; cuando subrayaba la necesidad de “Inversiones
generacionales”.
RESPONSABILIDAD
SOCIAL
Regresando a lo
local…Anhelos resumidos en una frase que se ha venido acuñando con la que se
intenta describir para lograr transitar por la senda del “Crecimiento y
desarrollo sostenible con responsabilidad social y ambiental”.
La anterior
frase tiene como propósito señalar el papel que debe desempeñar la gobernanza, siempre
excluimos de la ecuación a los politiqueros de siempre, representada por el
ordenador del gasto, de turno, cuya búsqueda permanente debe ser el bienestar –
léase, a través de la inversión en infraestructura social – de los cartagüeños.
Hoy, hay que
decirlo, creemos hemos sido justos cuando descalificamos las diferentes actuaciones administrativas, desde
pasado, cuyo resultado final fue la pérdida de importantes instituciones
económicas patrimonio de la ciudad, recordemos lo que queda de Emcartago y del
Hospital Sagrado Corazón de Jesús, solo por mencionar un par de
casos.
Aprovechamos la
oportunidad, un botón basta de muestra, para lamentar el proceso de liquidación
ante la Supersociedades de la Empresa de Teléfonos de Cartago S.A. ESP. Que hacía
parte del grupo Transtel sede Cali. En la que, tal parece, el Municipio de Cartago
aún conservaba el 35% de las acciones. ¿Algo que reclamar? Tanto rueda el cántaro hasta que se quiebra.
Lo que en sí, esas
pérdidas, le imponían un freno al desarrollo como ciudad; y como siempre, del
otro lado de la ecuación, para el beneficio de unos pocos; lo que conllevó,
hasta hace poco, que sus más exacerbados detractores la denominaran “Grande y
fea como Cartago”.
Porque la
realidad era que prácticamente, la ciudad, permanecía congelada en el tiempo. Hoy
para fortuna de todos intentando transitar por el camino de la equidad de la
mano del sector de empresarial en especial el nicho de la construcción; y de muchos
otros tipos de emprendimientos.
Lo que ha
derivado en crecimiento urbanístico a la vez que se ha ido haciendo más
comercial y turística; y en la media que reciba nuevas inversiones que generen
más empleo productivo el panorama fiscal y financiero continuará mejorando
ostensiblemente.
PROSPERA
LA CULTURA GASTRONÓMICA
Destacando el fortalecimiento,
a través de emprendimientos, de la cultura gastronómica propia e importada de
otras latitudes, complementando el también esperado turismo histórico,
religioso, ecológico y artesanal para la comarca Norte-vallecaucana.
El primer paso
dado, hay que reconocerlo, por parte de las recientes administraciones, tiene
que ver con la construcción de políticas públicas en torno al mejoramiento de
la imagen de ciudad y de la calidad de vida como la reposición del sistema de
acueducto en algunos sectores de la ciudad y el fortaleciendo de las bases
comunitarias.
A pesar de las
críticas, que no han de faltar, de los disconformes y atendiendo el llamado a la reactivación económica continúa
el mantenimiento y la remodelación de parques, plazoletas y plazas públicas y
de la malla vial.
Sin embargo, los
logros más recientes tienen que ver con el cronograma de ejecución de mega
obras de infraestructura vial, por parte del Gobierno Nacional, que impactaran
positivamente la conectividad y el desarrollo integral de la ciudad, la región y
con todo el occidente colombiano.
PLAN
DE VACUNACIÓN Y LA NECESIDAD DE UN HOSPITAL PÚBLICO
Si bien es
cierto la Gobernación del Valle de Cauca no le cumplió, al alcalde municipal
Víctor Alfonso Álvarez Mejia, con la dotación de 15 Unidades de Cuidados
Intensivos, UCI, que aunque eran pocas nunca llegaron.
En honor a la
verdad hay que reconocer que han realizado un importante acompañamiento en el
plan masivo de vacunación – Léase programa Mí Vacuna - en convenio con la IPS
Municipal; aprovechamos, de nuevo, la oportunidad para insistir en la urgente necesidad
de un HOSPITAL PÚBLICO.
Ya que el
Hospital San Juan de Dios, de naturaleza privado, no está prestando el Servicio
asistencial, poniendo en grave riesgo la salud pública, que requiere una ciudad
con más de 150 mil habitantes donde el mayor porcentaje de la población hace
parte del régimen subsidiado.
OBRAS
CLAVES EN EL DESARROLLO DE LA CIUDAD
Finalmente
siguen pendientes las obras esperadas, durante décadas, como el Terminal de
Transporte Terrestre de Pasajeros que solo será una realidad con el aporte y compromiso
del gremio del transporte privado en sus diferentes modalidades. ¿Cuándo se
convertirá en una realidad para la ciudad?
Al igual que el constante
funcionamiento y la modernización del Aeropuerto Internacional de Carga Santa
Ana; ya que, tal parece, cada día coge más vuelo. Donde es notable el concurso
de la empresa privada.
Son de resaltar las
otras obras de importancia estratégica como la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales,
PTAR, y el colector para la margen izquierda del Río de la Vieja; que no hacen parte,
pero si tienen relación con el asunto que nos ocupa hoy. Léase mantenimiento de
Zanjones.
Y que dejan
entrever que la ciudad, por fin, se encamina hacia ese desarrollo sustentable.
Eso es lo que esperamos si la ciudadanía participa activamente a través de una
correcta cultura ciudadana.
Recalcamos, el
punto anterior, porque también es cierto que en pasadas administraciones
crearon la misma sensación de progreso; para finalmente y en la práctica esos
cuantiosos recursos obtenidos no se destinaron correctamente y menos en lo que,
en el papel, se tenía como propuesto. Esperemos que la historia no se vuelva a
repetir.
LA
DEBIDA RESPONSABILIDAD SOCIAL DE LOS CARTAGÜEÑOS
Ante el anterior
y extenso comienzo es tiempo y lugar de dedicarnos al asunto que verdaderamente
nos ocupa hoy; y que tiene que ver con la citada frase “Crecimiento y
desarrollo sostenible con responsabilidad social y ambiental”.
Vista la
responsabilidad social desde la orilla de la gobernanza surge la pregunta ¿Qué
papel le obliga desempeñar a los Cartagüeños desde el punto de vista de su
responsabilidad social para con la ciudad?
Antes de
continuar con la siguiente reflexión; es menester aclarar que la inmensa
mayoría de los habitantes, de la ciudad, se esfuerzan con su comportamiento en
honrar ese calificativo de la “Cuna del Talento”.
Sin embargo,
algunos desadaptados, hacen todo lo contrario visto en la forma como se
expresan en la vía pública y en la cotidianidad que dejan muchas dudas sobre la
urbanidad y las buenas costumbres y modales.
Como por ejemplo
arrojando escombros en los zanjones, lo que provoca en tiempo de lluvias graves
inundaciones y calamidades especialmente en la población más vulnerable. ¿Víctimas
de su propio invento? ¿Ausencia de educación ambiental?
Al tiempo que
debemos reconocer, eso creemos, que el principal responsable de las continuas “burradas
en vía pública” es el actual MODELO EDUCATIVO que funciona a nivel nacional que,
por supuesto, se imparte en la ciudad.
Las nuevas
generaciones desconocen su historia, tan siquiera la moderna y contemporánea,
lo que los lleva a despreciar y a la falta de respeto por las instituciones
legalmente establecidas.
Al tiempo, hacia
las autoridades que las representan; es más y observándolo desde la otro perspectiva
algunas de esas autoridades hicieron uso de ese “poder” para debilitar más y
más al Estado municipal.
Para abreviar
nos enfrentamos a un colosal problema cultural que se expresa en la reiterada práctica
de las malas costumbres ambientales y de sana convivencia.
De otro lado y para
fortuna nuestra; atrás quedó la época en que los “nuevos ricos” se paseaban orondos
por la ciudad despreciando a las autoridades de turno y creyéndose los amos y
señores de la ciudad.
URGE
LA APLICABILIDAD DEL COMPARENDO AMBIENTAL
Ejemplos de
malas costumbres: Arrojar escombros, muebles y enseres a la vía pública, intersecciones
viales, puentes peatonales, separadores de avenidas, parques, plazoletas y
plazas públicas. Generalmente en el horario nocturno.
Disminuyendo, en
la descripción de los infractores, el grado de la bestialidad: sacar los desechos, basuras, en días
y horarios diferentes a la ruta de recolección de las mismas por parte de la
empresa prestadora de ese servicio.
Hoy no
abordaremos el tema del manejo, requerido en bolsas plásticas, de los excrementos
de las mascotas en esos mismos lugares.
Lo anterior nos
lleva a formularnos la siguiente pregunta ¿Qué hace falta, desde lo procedimental,
PARA DARLE APLICABILIDAD AL COMPARENDO AMBIENTAL?
UN
COLOSAL PROBLEMA CULTURAL
Las anteriores
prácticas nada tienen que ver con la edad, raza, sexo, estrato social, religiosidad,
estado civil, escolaridad, orientación sexual y política.
Igual observados
algunos peatones, también hace parte de la cultura ciudadana, que no hacen uso
de los puentes elevados, no utilizan las cebras – señalización vial - para el
cruce peatonal y mucho menos transitar por los andenes del lado derecho de esa vía
peatonal, salvo cuando la persona es un adulto mayor o en situación de discapacidad visual
o motriz.
Es notorio, y en
aumento, el tránsito veloz de jóvenes en bicicletas sobre los andenes
atemorizando, con esa actitud, al transeúnte en especial a los adultos mayores;
lo es también transitar en contravía en: bicicletas, patinetas eléctricas, motos
y triciclos entre otros.
En este punto
surge otra pregunta ¿Qué pasó con la reglamentación y el control de las zonas
azules?
Pero lo que más
sorprende es el parqueo de vehículos automotores privados y motos en zonas
prohibidas que afectan la movilidad pudiendo hacer uso, sus propietarios o conductores,
de los diferentes parqueaderos que funcionan, las 24 horas, en el cuadrante del
centro de ciudad.
Guarde su vehículo
y camine… Es bueno para su salud física y mental. Demos el ejemplo.
Dejamos hoy de
lado el problema de la movilidad en el centro de la ciudad derivado de la
actual ubicación, de la plaza de mercado, a pocos metros del Parque de Bolívar.
Solo esperamos
tenga algún tipo de solución y más allá de los decretos que se expidan al
respecto para combatir la congestión vehicular ya no solo en las horas pico, sí
derivado de la reactivación económica que sucede en la ciudad; y de la
esperada, y polémica, modernización de la galería municipal en manos de privados.
Los anteriores
casos, y otros que se quedaron sin mencionar, tienen su origen en la ausencia
de una adecuada educación que se debe de impartir primero, con el ejemplo, en
el hogar.
Para luego ser
reforzada en las Instituciones Educativas (IE) oficiales y privadas en áreas como:
urbanismo, buenas costumbres y de la Inteligencia vial. Amanecerá y veremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario