sábado, 6 de febrero de 2021

LAS CLAUSULAS DE CONFIDENCILIDAD DE ÁLVAREZ – SEGUNDA PARTE

 Lo que también pretendemos reconocer es la paciencia y el estoicismo con que el joven burgomaestre ha enfrentado en la cotidianidad y con el enorme peso de ser el representante legal de un municipio que se esfuerza por el cambio.

Sinceramente esperamos que todo sea por los nobles ideales con los que se forjo a pulso, y sin recursos, desde el movimiento comunal; al que le debe mucho más, que a sus últimos mentores.

LA NUEVA MESA DIRECTIVA

Como suele suceder en la conformación de las mesas directivas, es definitivo el peso político y el carácter del gobernante de turno; para propiciar y lograr acuerdos de voluntades que favorezcan su gobernabilidad.

Los que tienen lugar, con un alto grado de confidencialidad, entre los principales actores políticos en la ciudad donde cada uno – léase edil - busca el beneficio propio y pocas veces el de la colectividad.

Para entenderlo, revisemos superficialmente como quedó conformado el mapa político después del 28 de octubre de 2019: nadie coloca en duda que hubo muchas sorpresas…

Lo primero fue la derrota, en las urnas, sufrida por el empresario y político Benjamín Agrado Restrepo; él mismo fue el primer sorprendido; al punto que en su discurso en campaña… Manifestaba; palabras más palabras menos, …” que solo la muerte le quitaba la alcaldía”.

¿Habrá entendido que retar al destino, no trae gratas consecuencias? Y que una actitud serena acompañada de humildad, que no significa pobreza, sirve de mucho.

La siguiente gran sorpresa fue la del joven y polémico dirigente político, Carlos Mario Vélez, que se alzó con tres curules y de diferentes partidos. Así funciona recientemente la política.

Seguido de Germán Gonzalez Osorio, del que algunos afirman se quedó con dos curules. “Del dicho al hecho hay mucho trecho”. Queda entonces la duda razonable.

También fueron los resultados obtenidos por la administración anterior – léase casa londoño Zabala – ya que mediante una estratégica coalición de diferentes tendencias logró su continuidad; propósito que se advertía desde el Programa de Gobierno, del hoy alcalde.

Hay que reconocer fue uno de los dos mejores en la contienda programática por el voto popular; lo que finalmente se comprobó con los resultados electorales obtenidos, las consabidas cuotas burocráticas que aseguran el control del gobierno.

Y para el segundo en votación, por ley electoral, recibió como recompensa el derecho a una curul; en la que Agrado Restrepo se ha destacado por su conocimiento y liderazgo en el recinto sagrado de la democracia.

En el mismo orden de ideas también – por aquello del rigor de la cifra repartidora y el cociente electoral, esa casa política, - colocó una curul; a pesar que prácticamente sumo cada voto para obtener, la ciudad, ese tercer voto liberal.

Aprovechamos la oportunidad para lamentar la profunda crisis ideológica, programática y de unidad partidista que hoy enfrenta el Partido Liberal Colombiano en la ciudad.

El razonamiento anterior sirve de contexto para entender que la pasada mesa directiva del HCM, quedó prácticamente en manos de Vélez; otra cosa es que la pandemia no haya permitido todo lo que, el dirigente, esperaba hacer.

Y de eso no tiene la culpa sino, las limitaciones presupuestales, derivados de los estragos causados por la Pachamama; aunque insistimos que el virus/bacteria se formó fue en un laboratorio.    

La actual mesa directiva del HCM, quedó en manos de los “liberales independientes” con mucha experiencia y conocimiento en la cosa pública; más el espacio, por estrategia, dado a Agrado con la primera vicepresidencia.

Se espera entonces continúe la misma actitud conciliadora y de sostén que le dió, con mucho agrado, durante la vigencia anterior por parte de este último HC, hacia Álvarez Mejia. Lo que no se sabe es hasta cuándo.

Escrito lo anterior, queda el beneficio de la duda razonable, si las faltantes presidencias – para los próximos dos períodos - estén en manos de Aldemar Gomez Hurtado (léase casa Lopreto Duran.) Así funciona la política en la ciudad.

Y para finalizar el mandato constitucional le den la “pichona” a Naranjo Salazar que de verdad no logra ocultar su obsesión por llegar a ser alcalde, según él, de los Cartaginenses y tiene, desde lo intelectual, con que llegar.

Por último, en este capítulo, en honor a la equidad, y en gracia por los resultados electorales obtenidos; merecida tiene la presidencia, no sabemos cuándo, Carolina Bermúdez Bustamante.

No solo por la votación obtenida (1.318 votos); sino por el liderazgo que viene demostrando; e independiente de su lucha por la igualdad para los diversos cultos religiosos, eje central de su estilo de liderazgo.

EL DISCURSO DE INSTALACIÓN DE SESIONES DEL HCM

Ya nos tiene acostumbrados a sus bien elaborados discursos; pero en esta ocasión, por su molesta incapacidad en salud, se notó algo de improvisación; pero como siempre logró comunicarse con el HCM y la opinión pública.

Con su inconfundible voz serena y pausada e ideas manifiestamente calculadas…como administrador público: dió inicio a los asuntos de ciudad derivados de la pandemia del COVID-19.

Sobre el tema no proporcionó cifras relacionadas con el número de contagios, fallecimientos y de pruebas diarias realizadas para conocer el alcance de la pandemia; lo que se ha convertido en el coco de la actual administración, por aquello del aparente subregistro en las cifras.

Lo que quedó demostrado, con el rebrote, es que en la ciudad no funciona el Sistema General de Seguridad Social en Salud, SGSSS, ya que no existe un plan de acción coordinado desde la Secretaria de Salud; para actuar con las EPS e IPS y demás entidades prestadoras de salud en la ciudad, y detener la pandemia.

Más la ausencia de un sector de la población que carece de una correcta cultura ciudadana; ya que no observan, después de un año y cientos de fallecidos, los mínimos protocolos de bioseguridad: Uso de Tapabocas, Lavado frecuente de manos y el distanciamiento social.  

En el aspecto financiero, acertó en la ampliación a dos meses para los descuentos del 10%, 8% y 6% por pago oportuno para el impuesto de predial unificado.  

Siembargo sigue siendo muy prudente con el mejoramiento de la gestión fiscal del municipio, que exige una compleja estrategia para incrementar el recaudo, desde la actualización de las diferentes bases de datos y desarrollo de políticas de fiscalización tributaria entre otros.

Celebramos la renegociación de la pesada deuda pública con la banca, al disminuir los intereses, liberando recursos, en casi 400 millones; que comparado con el techo del presupuesto la cifra no es muy representativa, pero sirve para cofinanciar inversión social.

Al respecto y como reza el popular adagio… “En casa de ciegos, el tuerto es rey”. lo que debe de quedar claro es que este desequilibrio fiscal afectará, por lo menos la próxima administración municipal.

Lo anterior significa que mientras no se resuelva ese delicado punto en la agenda; el crecimiento y desarrollo sostenible con responsabilidad de social y ambiental será solo una quimera más.

No mencionaremos los macroproyectos sobre los cuales hizo referencia Álvarez Mejia, por aquello que no observamos que cuente con un flujo de caja requerido para darles forma; vía cofinanciación con el gobierno central.

Tiene perfectamente claro que, por el momento, lo más urgente e importante por resolver en la ciudad es el tema de movilidad; y sobre lo que se ha venido pronunciando Gabriel Benjamín Agrado; al que, dicho sea de paso, prodigó elogios en su discurso. ¿Qué propósito tendrán?

Atado a lo anterior, dejo sin siquiera mencionar, y a riesgo de equivocarnos, el tema del traslado de la plaza de mercado y pabellón de carnes del centro de la ciudad; que tanta mala imagen proyecta.

Que va en contravía, esa obsoleta estructura a punto de colapsar, de la imagen moderna de ciudad que la administración municipal pretende proyectar a propios y extraños.

Lo que confirma el interés de fincadas fuerzas empresariales, siempre interesados en hacer política con un sutil y delicado estilo,  que se benefician directamente de ese caos en el centro de la ciudad. Amanecerá y veremos.

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