El segundo acto protocolario
de importancia, después de la elección y posesión de la actual mesa directiva
del Honorable Concejo Municipal, HCM, para la ciudad.
Lo fue la
conformación de las comisiones permanentes: La primera o de Plan de Tierras; la
segunda o de Presupuesto y de Asuntos Fiscales; y la tercera o de Institutos
Descentralizados.
Lo que no está de
manifiesto es si las pasadas comisiones accidentales: de servicios públicos domiciliarios y de reactivación
económica entre otra, tendrán la misma mirada política que se le dió en la
anterior vigencia 2020.
Por aquello que no
tuvieron el respaldo esperado en la opinión pública, ni en las diferentes
veedurías ciudadanas. ¿Ausencia de una verdadera cultura participativa en
política o arraigada desconfianza?
EN
DEFENSA DE LA INSTITUCIONALIDAD
Si cumplieron
con el propósito de mostrar un HCM comprometido, como coadministradores, y
voceros de toda la comunidad – incluye a los abstencionistas por el voto popular
– defender sus intereses y velar por el fortalecimiento de la institucionalidad
y por ende del mejoramiento de la calidad de vida de los cartagüeños.
Antes de entrar en el asunto que nos ocupa hoy, es muy necesario dejar claro que este es un año netamente político, atizado por el momento coyuntural frente a las elecciones parlamentarias, que vive el país y con fuerte incidencia en la vida política local.
¿Se harán
sentir los dirigentes nacionales, regionales y locales con obras para la ciudad? ¿O
en nada incidirá esta pretemporada electoral?
EL
ENTORNO POLÍTICO NACIONAL
Entorno en el
que se debate el futuro de la democracia participativa en medio de una evidente
y malsana polarización; cuyos líderes y dirigentes miopemente no fomentan la
capacidad de diálogo, entre los aparentemente opuestos enfoques programáticos, que
conlleve a una convergencia de intereses colectivos a nivel nacional, regional
y local.
También debemos
reconocer, como contrapesos, surgen interesantes propuestas con peso académico
e intelectual, nacidas de diferentes centros de pensamiento; que buscan un
camino opcional, a través de un nuevo ideario que claramente excluye los
extremos ideológicos que tanta incertidumbre, temor y daño le hacen al país.
La aclaración
tiene que ver, distantes de maniqueas ideologías totalitarias, con el propósito
de este blog; como lo es asumir posiciones que respondan por el respeto, la
justicia, la tolerancia y la imparcialidad. En vano es seguir buscando el
interlocutor rio arriba…
EL
CONTEXTO POLÍTICO ADMINISTRATIVO
Lo anterior
significa en este contexto, político administrativo, que vive la ciudad de
Cartago en el Norte del Valle; que la mención, o no, de servidores públicos solo
obedece a su gestión pública o de dirigentes que intervienen en asuntos de
ciudad; y solo busca ese reconocimiento.
No significa
entonces que medie un propósito de proselitismo político, de nuestra parte, en
favor o en contra de alguno de ellos; solo pretendemos subrayar sus actuaciones
que consideramos pueden ir en la dirección correcta, o no, buscando el
crecimiento y desarrollo de la ciudad.
Lo que también
debe de quedar manifiesto, siendo ese el propósito, es nuestra participación como
observadores circunstanciales, lo que se circunscribe en apoyar la gestión del
alcalde municipal Víctor Alfonso Álvarez Mejia.
De hecho, como
librepensadores, no estamos atados a directrices de ninguna plataforma
ideológica y política nacional, regional o local; todo lo contrario, solo pretendemos
honrar esa libertad de pensamiento y expresión, que nos ofrece nuestra
democracia participativa; por lo tanto, actuamos en consonancia con esos principios
y valores.
Vano entonces es
seguir buscándole cinco patas al perro, cuando solo tiene cuatro; salvo que erróneamente
estén contando la cola.
LA
CLAVE ESTÁ EN LA PLANEACIÓN
Entrando en
materia… Regresando al acto protocolario en el sagrado recinto de la democracia
en el HCM; queremos hoy subrayar, todas lo son, la importancia de la Comisión
primera, tal vez por ser eso, o de Plan de Tierras.
De hecho, los
servidores públicos cabezas de esa comisión permanente como lo son: Aldemar
Gómez Hurtado y Gabriel Benjamín Agrado Restrepo; se han destacado con su
liderazgo por su papel, más que coadministradores, como defensores de los
intereses de la comunidad. Eso es lo que supuestamente reflejan.
La mención tiene
que ver con la enorme responsabilidad que les atañe porque es allí, en esa
comisión, donde próximamente se va a estudiar, discernir, proponer para modificar
y finalmente aprobar el Plan de Ordenamiento Territorial, POT.
Más aún, cuando
se considera que el presupuesto municipal es la principal herramienta de
planificación y control de lo económico y fiscal de un municipio.
En ese mismo
orden de ideas, es lo que el ciudadano del común debería comprender; en
especial la importancia de ese documento de planeación estratégica para el desarrollo
del ente territorial, más conocido como POT.
Hoy no nos
detendremos para ahondar lo que representa el POT, primero porque no conocemos
el borrador del documento; y segundo, lo más importante, por el respeto que le
prodigamos a los HC, en especial a Agrado Restrepo por el conocimiento y la
experiencia en el manejo de esa materia y como herramienta de planificación.
De los que
esperamos, comisión de tierras, sus aportes sean de utilidad para el desarrollo de esta comarca,
y dependiendo del enfoque que se le haya dado, que en su concepción esperamos
involucre la Subregión del Norte del Valle; preñada de fortalezas y
oportunidades.
La otra opción
es que la dirección que se le haya dado, desde lo territorial, sea el continuar
acercando y de buscar alianzas político, económica, fiscal y administrativa con
los Pereiranos.
LA
VISIÓN DE ÁLVAREZ MEJIA
Sin conocer el
borrador del documento POT y careciendo de un pronunciamiento oficial, sobre
ese tema, del mandatario de los cartagüeños; no es prudente ni recomendable
intentar interpretar, así sea, parte de la visión que le pretendió imprimir,
Álvarez Mejia.
Igual conocemos,
desde la logística y herramientas de análisis, las limitaciones presupuestales
para actualizar y articular ese valioso documento, en la intención de hacerlo sólido,
con el propósito de actualizarlo como última generación y que logre interpretar
una realidad, proyectada a 30 años, desde lo territorial.
Documento que en
la actualidad es visto como una enorme colcha de retazos que solo ha servido
para acompañar intereses personales o de un sector empresarial de la ciudad;
sin negar que le ha traído desarrollo y crecimiento urbanístico y por fortuna
de impacto ambiental de manera saludable y sostenible. Eso es lo que creemos.
Lo anterior
significa que el desarrollo urbanístico de la ciudad ha estado, para bien, en manos
de inversionistas privados; con la suficiente solvencia profesional, ética y moral
para adelantarlos.
Derivado de lo
anterior es válida la propuesta de adelantar una profunda reestructuración al Instituto
Cartagüeño de Vivienda INCAVI, que en su operatividad poco le ha aportado al desarrollo
urbanístico de la ciudad.
Finalmente, poco
cómodo se debe de haber sentido el burgomaestre, por los pronunciamientos,
desde comienzos de su mandato, de políticos oportunistas o malos perdedores
sobre su gestión administrativa.
Lo que si es
cierto es que el rigor de la pandemia del COVID-19 confirmó la crisis en la
salud que viene sucediendo desde que el Hospital, intervenido por la Gobernación
de ese entonces, dejó de ser patrimonio de los Cartagüeños.
Mas allá de ese
punto negativo, es reconocer que el principal centro de salud, de la ciudad, prácticamente
está fuera de servicio, debiendo ser el soporte vital para casi 500 mil
habitantes de la Zona Norte del Departamento.
Lo es también que
en la ciudad no funciona el Sistema General de Seguridad Social en Salud,
SGSSS, lo que debe hacer prender las alarmas sobre el real estado de la salud pública
local. ¿Existe un plan bien diseñado para la vacunación COVID-19?
Lo que hay que
reconocer, tal parece por falta de una adecuada comunicación con la opinión pública;
o por la reconocida prudencia del señor alcalde; y aparte de enfrentar los
efectos colaterales del confinamiento y del contagio en la cuidad.
RECORTES
DE LA PASADA VIGENCIA FISCAL
Durante la anterior
vigencia fiscal 2020 aparte de la refinanciación de la deuda pública; el
alcalde municipal le dedicó mucho tiempo a la planeacion estratégica; con el propósito
para dar cumplimiento a parte de lo propuesto en su Programa de Gobierno y en el
Plan de Desarrollo Municipal. “Es Contigo
Cartago 2020-2023”.
Sin conocer detalles
al respecto, es una realidad que temas como: El Aeropuerto Internacional de
Carga de Santa Ana, el Peaje Cerritos II, la PTAR, el Terminal de Transporte Terrestre
de Pasajeros, la Plaza de Mercado, el Pabellón de Carnes y el Colegio Maria
Auxiliadora. A propósito ¿Cuál será el destino del inmueble del antiguo Colegio
Liceo Cartago?
Iniciativas mediante
proyectos, articulados con todos los requisitos de ley, que se convertirán en
la prueba de fuego para el apoyo, o no, por parte de la actual Gobernación del Valle
del Cauca o quien haga sus veces. Como reza el viejo refrán… “A Santa Rosa o al
charco”.
Más la suerte del
Antiguo Hospital Departamental de la Ciudad en relación con la IPS Municipal;
la primera, hoy, en manos de privados, todo lo anterior significa mucho trabajo
en el HCM; y con la madera que tienen aguantan.
Esperando, eso creemos,
sea la intención de Álvarez Mejia, todo en beneficio de la comunidad Cartagüeña
y Norte Vallecaucana. Amanecerá y veremos.
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