EMCARTAGO – PATRIMONIO DE TODOS

Motivados por la fuerza del cambio y de la mano de la experiencia de aquellos dirigentes que sacaron adelante la ciudad en medio de crisis fiscales y financieras; es entonces el momento de actuar, los que tienen las riendas de la ciudad, con claridad emocional y racional superando, día a día, los coletazos causados por la pandemia del COVID-19; todos caminando decididos el sendero de la reactivación económica.

ALTO COSTO DE LOS SERVICIOS PÚBLICOS DOMICILIARIOS

Esa terrible situación tiene que ser observada con claridad por parte de las empresas prestadoras del servicio público; que aparte de la energía y Diselecsa,  está el gas domiciliario – léase Gases de Occidente - principalmente. 

Lo anterior significa que, en nuestra ciudad, el alto costo de los servicios públicos es un tema neurálgico; genera insatisfacción y angustia en toda la población, pero en especial en la clase media, emprendedora, trabajadora y vulnerable de la ciudad.

LAS PÉRDIDAS EN EL SUMINISTRO DE AGUA POTABLE

Entrando en materia, el solo hecho que la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, SSPD, haya “devuelto” la Unidad de negocios – Acueducto y alcantarillado – lejos está de significar que la crisis financiera, que en el 2014 obligó la intervención por parte de este órgano de control y supervisión, haya sido superada en su totalidad.

EL ESTADO Y/O LA EMPRESA PRIVADA

Lo igualmente cierto es que una empresa que actúa como monopolio en la prestación de un servicio público; donde similares como EMCALI o en otros departamentos, que aparentemente son administradas con eficiencia, eficacia y efectividad logran valorizarlas. ¿Por qué no nosotros? 

Al punto que algunas empresas a nivel global cotizan en la bolsa de valores; recordar que el agua ya se cotiza en Wall Street. ¿Nuevo negocio multimillonario, en poder de los jeques árabes?

Las más exitosas intentando absorber, como EPM, a nivel nacional otras de su misma naturaleza; o pretendiendo fortalecer la infraestructura energética del país – Caso HidroItuango – inclusive, para este ejemplo, a pesar del costo agregado de haber generado irreparables afectaciones ambientales y de empleabilidad en el área de influencia durante el transcurso y en su actual construcción.

Lo anterior indica el holgado margen de rentabilidad y por supuesto la dimensión del negocio que significa producir agua potable y en el largo plazo a bajo costo como sería el caso del megaproyecto de los antioqueños. Inclusive con los escándalos, de por medio, por corrupción administrativa.

El negocio del agua potable es lucrativo y ello sucede mientras sea bien administrado; para el caso nuestro y si de buenas administraciones se trata de reconocer, el dictamen no es nuestro, pero lo acogemos; se destaca la gerencia, en el pasado, del Ingeniero Jairo Galindo Jiménez.

FUNCIONARIOS PÚBLICOS CAPACES

Este último punto nos lleva a volver insistir en la necesidad, por parte de responsables de posesionar en cargos claves del municipio como: secretarías, subsecretarías y entidades descentralizadas; a profesionales idóneos con conocimiento y experiencia en el responsable y delicado ejercicio de sus funciones; que frente a los retos encuentren soluciones de fondo; alejados y/o por encima de consideraciones de índole particular, ideológico o político.

SOBRE DIAGNOSTICADA CON PÉRDIDAS

Regresando al asunto que nos ocupa hoy…La multimencionada empresa de servicios públicos domiciliarios, no cabe la menor duda, se encuentra sobre diagnosticada; pero sin actuar en la dirección correcta, más adelante comprenderá usted, atento y respetado lector, que el principal problema son las pérdidas del líquido en el proceso de distribución.

Los estudios indican que mientras el número de suscriptores de acueducto y alcantarillado crecen o se estabilizan año tras año; el número de metros cúbicos facturados disminuye, más que proporcionalmente, presentándose pérdidas en dicho servicio en algunos casos superiores al 50%.

EL RETO DE LA ACTUAL GERENCIA

Lo anterior significa que el enorme reto que enfrenta el actual gerente Juan David Piedrahita López es garantizar la estabilidad operativa y financiera de Emcartago y no es otra cosa que diseñar una hoja de ruta que le permita reducir al mínimo las perdidas ya mencionadas en solo dos (2) años. Lo contrario apague y vámonos para Pereira.

Pérdidas que no solo obedecen a la deteriorada red de acueducto, sino al contrabando, de hecho, ya se observan obras encaminadas a la reposición de ese sistema que incluye en algunos casos el de alcantarillado. Esa es la dirección correcta.

AUSENCIA DE SENTIDO DE PERTENENCIA PARA CON LA CIUDAD

Sinembargo, otro factor, no menor, que incide en la relación metros cúbicos producidos versus facturados tiene que ver con las tomas de agua fraudulentas no solo por parte de los asentamientos ilegales sino de los usuarios legalmente constituidos que buscan y muchos logran burlar al Estado municipal; inclusive en el sector comercial del centro de la ciudad.

De dicha práctica hay que reconocerlo, en el pasado, se realizaba con la aquiescencia de funcionarios públicos de Emcartago que se prestaban para las conexiones fraudulentas; hoy creemos es historia del pasado, en todos los casos es una falta de sentido de pertenencia para con la ciudad.

RECORDANDO LA HISTORIA

A propósito de historias del pasado… La tragicomedia de Emcartago comenzó con la escisión del componente telefónico, hasta hace poco en manos de un operador privado Transtel; localmente con la razón social de Teléfonos de Cartago S.A. E.S.P. Actualmente en proceso de liquidación ante la SuperSociedades.

Conservando el municipio para esa época el 35% de las acciones; valoradas al cierre de la vigencia fiscal 2011 en aproximadamente  $2.500 millones de pesos, tal parece el municipio, en el 2010, intentó venderlas pero nadie ofertó sobre ellas.

Muchos años después fue la visita, a la ciudad de Cartago en el Norte del Valle, de la cartagüeña, Administradora de Empresas, Patricia Duque Cruz para esa época Superintendente de Servicios Públicos Domiciliarios.

En esa ocasión, Duque Cruz, dejo claramente planteado que para salvar del colapso financiero a Emcartago - sobrevivía a punta de créditos de tesorería - solo le restan tres opciones: capitalizarla, la separación de los servicios y lo que posteriormente se cristalizó como la venta del componente eléctrico como lo era la opción de un operador privado.

Dicho en otras palabras, y si leemos entre líneas, quedó prácticamente eliminada de tajo la opción de la capitalización. ¿Por qué razón? Más adelante lo comprenderá, es decir todo estaba fríamente calculado. ¿Quién o quiénes se favorecieron?

De hecho, esa duda razonable tomaba fuerza cuando observábamos, en esa época, un caso similar y de mayor cuantía por aquello que la opción adelantada fue la capitalización ¿Por qué a EMCALI sí? y EMCARTAGO no.

PELEA DE TIGRE CON BURRO AMARRADO

Hoy lo confirmamos para Superservicios, era más “cómodo” darle paso a la privatización del componente eléctrico; ya que dicha transacción involucraba más allá de compromisos políticos; primaba el criterio financiero; visto desde la inversión privada y amañada. ¿Volverá a suceder?

Continuando con el cronograma de intervención… Lo que dio comienzo con el primer agente interventor el abogado Jaime Alberto Mendieta Pineda; que tenía como tarea entregar “un primer diagnóstico real” de Empresas Municipales de Cartago (Emcartago), por la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios.

Hoy podemos concluir que la Superservicios, se tomó el tiempo suficiente para entregar un primer informe oficial completo y detallado al Gobierno Nacional cuya competencia recae sobre el Ministerio de Hacienda y Crédito Público y en general a los diferentes entes de vigilancia y control y por supuesto al alcalde Municipal sobre la situación administrativa, técnica-operativa y financiera de Emcartago; la primera conclusión… Al final, no lo mencionaba ese primer diagnóstico, todo estaba fríamente calculado para vender el componente eléctrico. ¿Crónica de una venta anunciada?

En esa primera fase de intervención administrativa, el grueso del análisis se centró en la contratación, según la super era uno de los aspectos más claves, derivado del manejo administrativo durante las pasadas administraciones.

Lo que a posteriori incidió en el enorme desequilibrio financiero que presentaba Emcartago; y es lo que también suponemos, la mayoría de los indicadores contables y presupuestales estaban por debajo del punto de equilibrio financiero de la entidad.

Hoy queda claro, y más allá de la contratación que era más un daño colateral, el verdadero problema estaba identificado desde hacía muchos años sino décadas; y no era otra cosa, como solución, que intervenir las perdidas ya fueran ocasionadas por el mal estado de la infraestructura de servicios públicos o por conexiones fraudulentas.

Entonces hubiera mejorado la facturación y por ende el flujo de caja con mayores ingresos; de hecho, si lo anterior hubiera sucedido, no hubiera sido necesario de vender el componente de energía.

Lo anterior se confirma por aquello que las causas de la intervención obedecieron al “Riesgo inminente en la prestación del servicio de energía, acueducto y alcantarillado” lo anterior confirma el hecho que el problema se venía ventilando con mucha fuerza desde el año 2004; el siguiente paso se dio en septiembre de 2012 cuando nuevamente se pronosticaba, la SSPD, sobre una posible actuación directa de esa entidad.

EL PELIGRO DE LOS CRÉDITOS DE TESORERÍA

La pregunta que surgía en ese entonces era ¿Por qué no la han intervenido? La respuesta era muy sencilla… Emcartago, en el pasado, funcionaba a partir de los créditos de Tesorería.

Una breve explicación; si observamos los informes de gestión de esa entidad y desde el 2004 nos encontramos que el “normal funcionamiento” de esa entidad era la habilidad de los anteriores gerentes para apalancarse financieramente.

Es decir, lo hacían – a un costo financiero muy alto – a través del crédito bancario para pagar nominas, compra de energía y atender gastos generales entre otros.

LA INTERVENCIÓN DE EMCARTAGO

Como inicio de la puntada final fue la posesión del nuevo agente especial de Emcartago el ingeniero electricista Néstor Ricardo Aragón García custodiado con el encargo que el mismo presidente de la República, de ese entonces, en el sentido que su misión era “recuperarla para devolverla como, lo que es, patrimonio de los cartagüeños”. ¿Discurso populista como mecanismo de distracción sobre lo ya decidido?

Basados en sus primeras declaraciones, hoy de nuevo concluimos, que indicaban que uno de los costos variables que más demanda liquidez para Emcartago era la forma como accedía a la compra de energía - en bloque o en bolsa – que por supuesto afecta, por lo costosa, la estructura financiera y su autosostenibilidad por lo menos en el mediano plazo 10 años.

Sin embargo, era solo una cortina de humo para distraer la atención de lo realmente importante y más allá de determinar si con esa capacidad instalada, como comercializadora de energía, soportaría una demanda futura del servicio en una frontera de 10 años. Hoy concluimos que la unidad de negocios que generaba positivos flujos de caja era el componente de acueducto y alcantarillado.

LA PRUEBA REINA IGNORADA POR LA SSPD

Ahora entendemos que aunado el desafortunado manejo financiero y comercial, durante muchas administraciones; Emcartago no estaba en las condiciones administrativas y técnicas para determinar - en su nicho de mercado - la demanda total y actual por el servicio y el consumo en sus unidades de negocios y en los sectores residencial, industrial, comercial y oficial; solo disponía de una cifra tímida que indicaba que, para esa época,  un porcentaje significativo los  usuarios no facturan; mucho menos estimar una potencial demanda futura digamos en 10 años.

Solo “sospechaban”, sin disponer de cifras exactas, las cuantiosas pérdidas (del 50% por lo menos, en la distribución y transmisión de las redes de acueducto y alcantarillado. Derivado de este último, haciendo hincapié en ello, en algunos sectores de la ciudad se están presentando colapsos en las vías y zonas públicas.

EL VIEJO TRUCO

Al no poder cuantificar la relación costo beneficio en cada una de esas dos unidades de negocio – acueducto y alcantarillado - acudían a los ingresos por la facturación del servicio de alcantarilladlo que terminaba “subsidiando” el mal funcionamiento expresado en fugas y perdidas, en las otras dos – energía y acueducto - para de esta manera evitar la iliquidez de la operación en el inmediato plazo.

Como finalmente esos ingresos, no eran suficientes, el problema se traducía y se resolvía “temporalmente” mediante alzas “moderadas” - evitando generar pánico - en las tarifas. Un problema que reconoce el imaginario colectivo son los altos precios, en la ciudad, en casi todos los bienes y servicios.

Hecho que se comprueba revisando el comportamiento de estas facturas durante los últimos cinco años e incrementos supuestamente en más del 100% frente al registro histórico, contrario a lo manejado en la formula; lo que obliga a pensar en una errónea o amañada, a favor de la empresa, o de lectura en el terreno.

Afectando de manera directa al usuario, en especial el residencial en los estratos 1, 2 y 3 que ven con angustia e impotencia las alzas y la forma como deben de desplazar el consumo de otros bienes o servicios también de primera necesidad –alimentación, educación, salud y vivienda entre otros - para poder atender la factura de servicios públicos.

LOS QUE PAGAN CARGAN CON LA DEUDA DE LOS EVASORES

Estamos hablando de unos usuarios que tienen el servicio, sin medidor y por supuesto no facturan… ¿y el otro porcentaje qué? Sin mencionar el tema del manejo de los supuestos subsidios y subsidios cruzados a los estratos mencionados, contemplado en la ley 142 de 1994.

Con solo este enfoque es prácticamente imposible que la Empresa, como en el pasado, como algunos especulaban, intente recuperar el manejo del servicio aseo – léase Cartagüeña de Aseo Total y/o el alumbrado público “Diselecsa” - Lo que sí es viable es que se permita la entrada de otros operadores a competir con los presuntos monopolios que operan en la ciudad.

¿ACUEDUCTO Y ALCANTARILLADO CAMINO DE PRIVATIZACIÓN?

Lo que es probable es que más de 25 años después le puede suceder lo mismo que lo que hoy acontece con el 35% de las acciones de Teléfonos de Cartago S.A. E.S.P. y con el 15% de Cartagüeña de Aseo Total; sin contar con la reciente privatización o concesión del componente eléctrico a Energía de Pereira.

Para el primer caso en el sentido que es muy posible que un operador privado de telefonía, de la vecina ciudad de Pereira, compre lo que queda del servicio de telefonía fija. Y que el componente de acueducto y alcantarillado quede finalmente en manos de los pereiranos.

Situación que significaría, como municipio, seguir perdiendo en ese otro tipo de categoría - sin grandes empresas públicas - aumentando la desigualdad social por el encarecimiento del servicio privatizado. Lo anterior solo es una alerta temprana.

¿PLAN MAESTRO DE ACUEDUCTO Y ALCANTARILLADO?

Adicionalmente lo que se ha convertido, de años atrás, en un caballito de batalla administrativo seguramente para darle contentillo a la SSPD es el diseño e “implementación” de un Plan Maestro de Acueducto y Alcantarillado.

La realidad es otra, por aquello de la multimillonaria cifra requerida para darle aplicabilidad; por lo pronto es conveniente se siga trabajando en la reposición de las redes, ejecutar la sentencia sobre la construcción de la PTAR y no de una nueva planta de tratamiento de agua potable sino de repotenciar la actual. Ojo con eso.

Lo que sí está muy claro para el actual gerente, Piedrahita López, es que tiene solo dos (2) años para resolver el problema de las “perdidas” en el suministro de agua potable que se originan como anteriormente lo explicamos por el mal estado de las redes, el contrabando o la conexión directa a la red distribuidora.

Esas perdidas se deben cuantificar, con exactitud, con los proyectos de macro y micro medición; de esta última esperando no se convierta en un abuso para con el usuario y le estén cambiando el medidor cada dos años como sucede en algunos casos. Amanecerá y veremos.