Todos los que genuinamente,
por décadas, nos hemos interesado en los grandes proyectos por adelantar en la ciudad,
siempre terminamos abordando el tema del Aeropuerto Internacional de Carga y de
Pasajeros; hoy simplemente Aeropuerto de Santa Ana.
La razón de ese protagonismo
obedece a que es una obra de importancia estratégica como Plan Maestro; y si,
por fin, se logra colocarlo en operación “ojalá” diaria - ya sea como
aeropuerto de carga y/o alterno de pasajeros - se daría el primer salto en lo
que estudiosos del tema han determinado denominar, por su ubicación geoestratégica, la conformación
de un Nodo de Transporte y Logística.
Que en su versión más simple
contemplaría las siguientes iniciativas; casi todas para ser ejecutadas en el
mediano y largo plazo hacia el 2032; pero que deben dar inicio; máxime si están
marcadas en el actual POT de primera generación -según acuerdo 015 de mayo de
2000, modificado en el 2006, 2010 y 2013 - que dicho sea de paso requiere
revisión para llevarlo a una segunda generación como lo ordena la ley.
Documento donde se traza
claramente la articulación del transporte férreo (Tren de Occidente),
Terrestre (Terminal de Transporte Terrestre de Pasajeros, Avenida Santa Ana, Flor
de damas y Sotará - Anacaro) y Aéreo (Aeropuerto) en un Centro de Transferencia
de Carga Multimodal, Centro de Acopio y Parque logístico.
Aclarando que el nombre de
la criatura, por aquello de la limitación de los recursos, queda en manos del
gestor de éstos; los que deben resultar formalizados en la Capital de la
República.
Obra que dinamizaría la
económica local y regional, a través de la producción y venta de bienes y
servicios que van desde el vendedor formal, taxista hasta el gran empresario e
industrial y la banca de fomento.
Otras propuestas privadas,
como otra que veremos más adelante, de empresarios locales y regionales para
invertir en centros logísticos en el sector de Zaragoza y Santa Ana, nos llevan
al lejano recuerdo de las antiguas bodegas de almacenaje cuando la carga se
transportaba por el hoy agonizante Río Cauca; que de materializarse, con el transcurrir
del tiempo, todas esas iniciativas harían parte de una gran red multimodal.
También está en el
imaginario colectivo un Centro de Multiservicios de Transporte Pesado (CMTP)
útil para la transferencia de carga recibida de esa red multimodal.
Algunos observadores oportunistas
afirmarán que son solo quimeras; no lo creemos…Todo lo contrario es un sueño
que podría hacerse realidad; es solo dar ese primer gran paso…La puesta en operación del aeropuerto.
Son procesos, vistos como
desarrollos territoriales, que le apuntan al progreso de la Subregión Norte, siempre
y cuando paralelamente se le dé tramite y aplicabilidad a un esquema asociativo territorial, contemplado
en la ley 1454 de 2011, que posicione a la ciudad de Cartago.
Adicionalmente recordemos que
tomando como base la población de los 5 municipios con los que tenemos frontera
territorial (Alcalá, Ansermanuevo.
Obando, Toro y Ulloa) incluyendo la nuestra;
esa población total equivale casi 240 mil habitantes; de esos el 63%, es decir
aproximadamente 151 mil personas, según proyecciones, pertenecen a Cartago.
En ese orden de ideas, según
lo esperado, algunos observadores de la cosa pública, señalan lo inoportuno de
estudiar la propuesta, tal parece, de algún senador del Risaralda; en el sentido de anexarnos
al modelo del Área Metropolitana Pereira-Dosquebradas-La Virginia.
La razón, entre muchas
otras, en su aplicabilidad el municipio además de otros recursos nacionales y
departamentales, debería de entregar el manejo de la sobretasa a la gasolina; aunado
el hecho, que ésta, se encuentra pignorada al pago la deuda acumulada por
más de $32.000 Millones; a razón de casi
$5.500 millones anuales durante este mandato, como abono a capital más intereses a Infipereira
¿Coincidencias con el vecino municipio y Capital del Risaralda?
Volviendo al tema de ciudad-región que ha futuro podría atender la demanda de bienes
y servicios de una población que proyecta al 2032 más de 570.000 habitantes en
la subregión del Norte del Valle incluyendo San José del Palmar (Choco
biogeográfico).
Para sorpresa de muchos; el asunto que verdaderamente nos ocupa hoy
tiene estrecha relación con garantizar el normal funcionamiento del
multimencionado Aeropuerto de Santa Ana.
El tema tiene que ver,
también con una añeja – por más de 6 años - propuesta que por su calado, y en relación con programas
de gestión del riesgo en obras prioritarias de riego, drenaje y control de
inundaciones, involucra los intereses de la Victoria, Obando y Ansermanuevo
municipios rivereños de la margen derecha del Rio Cauca en un área de 23.838
hectáreas, de los cuales 9.000 están ubicadas en la zona plana del Municipio de
Cartago.
En esa área de influencia
pertenecen 137 pequeños, 55 medianos y 37 grandes agricultores; básicamente la
propuesta se centra en la construcción de las obras de dique y protección de
orilla de la curva de Coke paralela a la margen derecha Río Cauca en un área de 400 metros
aproximadamente.
Más
allá que la ejecución la obra - como una alianza público privada - sirva para
el desarrollo de una agricultura segura, eficiente, competitiva y la generación
de mano de obra en el sector rural del municipio; por su ubicación evita el
riesgo que en época invernal la fuerza de la corriente (aguas) ocasione
inundaciones, como en el 2010, que amenazaron la infraestructura, (Pista de aterrizaje)
del Aeropuerto de Santa Ana.
Aparte
de lo anterior, la erosión - causada por diversos factores entre otros fatiga
de suelo - es tan agresiva que representa un riesgo inminente para agricultores
y habitantes de la zona rural de Cartago, especialmente en los corregimientos
de Cauca, Guanábano, Guayabito y parte del área urbana del municipio de Cartago
en el Norte del Valle. Amanecerá y veremos.
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