Para darle forma al asunto que
nos ocupa hoy, recordemos como define el Diccionario Esencial de la Lengua
Española, la palabra Comodín: 1. En algunos juegos de naipe, carta que puede
tomar el valor de otra, según las necesidades del jugador; 2. Cosa que se hace
servir para fines diversos, según conviene a quien la usa.
Siendo coherente con la idea
central, debo retractarme de lo escrito - tan solo en el primer párrafo - en
artículo relacionado y titulado “Del discurso del candidato”.
Echemos en cara “…la actual
(campaña) es más fácil de interpretar por aquello que prácticamente solo hay
dos candidatos, muy distantes del resto, en la intención de voto en la ciudad
de Cartago en el Norte del Valle”. Se incluye hoy el paréntesis.
Aceptando el yerro y dadas
las circunstancias, entremos en materia, corren los rumores en parques, plazas
públicas, atrios de iglesias, discotecas, bares, cantinas, cafetines y bebederos - de ser ciertos - donde sugieren que la actual tramoya da comienzo, horas después de
los resultados de ese 30 de octubre de 2011; resultando electo el hoy Alcalde
Álvaro Carrillo.
Tal parece…en presencia del nuevo alcalde, y ha puerta cerrada, en
medio del jolgorio y la francachela se definió la “línea de sucesión al poder”
bajo el supuesto - de hecho nadie lo mencionó, tal vez por la celebración - que
se convirtiera en una buena administración. Sucedió todo lo contrario.
Desde mediados de 2012 la
presión de la opinión pública no se dejó
esperar, al punto que se escucharon voces autorizadas sobre adelantar una
revocatoria del mandato, iniciativa que no prosperó por el blindaje del
Programa de Saneamiento Administrativo Fiscal y Financiero, decreto del que
muchos opinan se convirtió en letra muerta durante esta administración.
Rápidamente la élite de la dirigencia
local entendió que había que, repensar y refundar políticamente a la ciudad,
darle un giro de 180% grados; decisión que se supone rompió esa “supuesta”
línea de sucesión al mando.
Ese sector político que se
sintió abandonado, a pesar que inicialmente manifestó acatar las reglas del libre ejercicio para
participar dentro de una democracia y adherir públicamente a la nueva compaña, rápidamente
se retractó y hoy está a la espera… haciendo tolda aparte.
Como la ambición rompe el
saco, aún no hay consenso frente a cual de las dos campañas con mayor intención
de voto va a apoyar. ¿Quien se puede beneficiar? O ¿Quiénes se pueden
perjudicar?
Lo anterior es lo que hace más
difícil el análisis y en ese orden de ideas muchas cosas pueden suceder e
inclusive inimaginables.
El viejo truco se cierne sobre
todas las campañas; casi un año después que cada loro desde su estaca empezara a
rayar sobre el papel su estrategia electoral, una de esas propuestas no ha
definido aún el aval que la acredite, el candidato, la lista al concejo o que
tipo de alianza o acuerdo piensa adelantar.
Si bien es cierto la fecha
límite de inscripción de candidaturas vence el 25 de julio de 2015, está claro
que el que primero defina listas y se inscriba, puede hacer modificaciones y pega duro y dos veces por aquello que
demuestra organización y disciplina. Recuerden la campaña la gana la estructura
y no el candidato.
Lo contrario, no tiene
ninguna presentación que alguna otra campaña, del centro, no haya podido definir la lista de
candidatos al concejo, solo un ejemplo: precandidatos que fueron rechazados por
existir en contra de ellos demanda por alimentos, da una clara idea de la
estructura que intentan ensamblar.
Se supone que una organización
consolidada, debe de haber estudiado y definido el perfil de cada uno de sus precandidatos.
Todo lo contrario, tal parece, abunda la improvisación y la inexperiencia.
Abro un pequeño paréntesis,
y como era de esperarse a menos de cuatro meses, surge del anonimato - La ley
lo permite - la propuesta del movimiento Alianza Verde en cabeza de abogado
Gabriel Arias; sin mayores datos sobre su trayectoria política y de liderazgo
con la comunidad; eso si debilitando la campaña que intentaba representar la
izquierda en la ciudad.
Volviendo al tema que nos
ocupa; está sin definir - donde pegar primero - dicha propuesta burocrática, según
algunos analistas proyecta, a razón de 4 votos por funcionario público
aproximadamente 1.400 sufragios. ¿Dónde van a parar? ¿Es posible que a la alianza
verde? Lo dudamos.
Sencillo tiene tres
opciones, adherir a cualquiera de las dos campañas con mayor intención de voto
en la actualidad o postular un candidato propio.
Es ahí donde nace la
incertidumbre con esa votación no le daría
sino para un concejal – de hecho ya lo tiene – pero, si va solo, de la baraja de posibles candidatos, para la Alcaldía, ninguno cumple, aparte que acepte el encargo, con el
perfil mínimo como lo es madures política, psicológica y estudios
universitarios.
Para finalizar, concentremos
la atención en las dos campañas con mayor opción y recalculemos los votos
proyectados.
El Ingeniero Gabriel
Benjamín Agrado Restrepo, arrancaría con un capital político “banderazo” de
(1.402 votos) - que alcanzó en las pasadas elecciones para Concejo por el
Partido Liberal - su esperanza se centra en recibir todo el apoyo, de su nuevo partido, el Centro Democrático CD (7.558 V) votación que obtuvo
para Congreso de la República - no existe punto de referencia para Alcaldía - ;
más la votación, ahora si, de las
elecciones 2011: Alianza Social Independiente (563 V), Cambio Radical (500). Para un total de 9.933 votos, castiguemos
para el análisis esa votación con un 40%
quedaría como partida con 5.960 votos para competir.
El abogado José Ignacio
Londoño Zabala obtendría su capital político, si logra, la conformación de una
gran Unidad Nacional Local y con base en la votación para alcaldía de 2011 así:
Partido Social de Unidad Nacional (4.414), Partido Liberal (3.733), Conservador
(1.049), Partido de Integración Nacional hoy opción ciudadana (2.019), Alianza
Social Independiente (1.325), MIRA (700) Autoridades Indígenas de Colombia (400),
Cambio Radical (1.500) más la alianza
local (3.942) ver articulo “Los votos de los candidatos” de 01/31/2015 totalizaría
19.082 votos, igual castiguemos esa votación con un 40% nos daría 11.449 votos para
empezar a disputar la Alcaldía.
La pregunta obligada… ¿Dónde
encaja el comodín? Amanecerá y Veremos.
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