Si examinamos la memoria
política del Municipio de Cartago en el Norte del Valle en materia de
elecciones para Congreso de la República, ésta campaña pasará a la historia
como la más predecible.
Hace casi cuatro años, el
Partido Social de Unidad Nacional pasaba por su mejor momento; de otro lado, el
jefe natural del Partido de Integración Nacional, a pesar que ya tenía la
cuerda pisada, avanzaba con su poderosa maquinaria aceitada.
De hecho, localmente, los
resultados fueron los esperados: El Odontólogo, de origen liberal, Adolfo León Rengifo Santibáñez, obtuvo la
curul por el Partido de la U; con una votación tal vez sin precedentes 32.553
votos de los cuales 14.987 votos (46%) son de su ciudad. y 490 (1.5%) pertenecen
a Ansermanuevo; los 17.566 restantes se los colocó la Medica Dilian Francisca
Toro Torres, gran amiga de Cartago.
A su vez el político, de
origen conservador, Carlos Arturo Quintero Marín obtuvo, por el PIN, una curul
al Congreso, con 60.816 votos de los cuales 5.894 votos (9.7%) son de Cartago y
5.142 (8.5%) pertenecen a su tierra natal, el resto, sino todos, los 49.780 se
los debe al Político Juan Carlos Martínez Sinisterra.
Transcurrido el calendario;
a la fecha se da, casi que, por descontado el intento de reelección de Rengifo
Santibáñez a la Cámara y existen serias dudas sobre las intenciones de Quintero
Marín de embarcarse en una nueva aventura electoral; aunque siempre queda el
beneficio de la duda; y a lo mejor se lancen, esperando que la decisión solo dependa
de ellos.
Tal parece, para Quintero,
el principal problema y separado del cansancio de los años, es la crisis
interna local al interior de ese Movimiento - hoy Opción Ciudadana - aunque
algunos de sus antiguos simpatizantes, lo confirman y esgrimen como sobradas
razones que no es menester explicar aquí; otros estiman que técnicamente son
muy pocos los votos, en manos del ex diputado y ex candidato a la Alcaldía, que
intenta transferir para otra campaña.
Para el Odontólogo la
principal limitante es la financiación; igual pesa su distanciamiento de esa
colectividad, aunada la enorme polarización, también local, al interior del partido de la U.
Tampoco se descarta que a última hora, los mencionados
Congresistas, anuncien su participación; de ser así, lo harían por otras
circunscripciones lectorales, pudiendo ser Choco, Caldas o Quindío.
Los motivados por otro tipo
de interés político, de oficio contradictores y proponiendo el voto en blanco o
el abstencionismo; le apuestan, sin titubear, a que el Norte del Valle se
quedará sin congresistas que nos representen; porque, de acuerdo a su opinión,
ninguno sirve, como políticos tradicionales.
Posiciones más moderadas, insisten
en que hay razones que saltan a vista como: la ausencia de un verdadero liderazgo
subregional que tenga la capacidad de motivar, con buenas razones, al
electorado para que se acerque a las urnas y elija al candidato que más
convenga y que quiera y pueda con el encargo.
Adicionalmente ponen de
relieve las consecuencias de un debilitado liderazgo departamental, recordemos
que los principales barones electorales se encuentran incursos en
investigaciones o condenados.
Situación que los ubica en
desventaja estratégica, al momento de intentar conservar y/o recuperar el
poder, ya que tienen que actuar en cuerpo ajeno, siendo difícil el control
directo sobre el proyecto mismo, aparte que prácticamente desconocen los
verdaderos lideres de base, de cuadra y de barrio y la forma como se mueven en
ese último día de elecciones, entonces se someten al liderazgo de los Concejales.
Lo anterior facilitó la aparición
espontánea de una cadena de intermediarios que hace invisible y más oneroso
cualquier proyecto político; y lo más importante, se insiste en candidatos difíciles
de “vender” en el norte del valle, y en otros que están camino del retiro.
Frente a estos acontecimientos
coyunturales, y en el mismo orden de ideas, se podría ver afectada una
candidatura que arrancó prematuramente; la del político Fabián Andrés Gallego Giraldo,
nadie le resta meritos por su liderazgo natural; tanto que la mayoria le augura,
en el mediano plazo, un exitoso futuro; en su contra juega su falta de
preparación integral, juventud e inexperiencia - no atinó a alejarse en su
momento del PIN - y heredando los problemas gerenciales de su jefe político; razón
ésta última, a la fecha, para que no haya logrado consolidar su proyecto político,
aunque aún hay tiempo.
La siguiente candidatura, a
pesar del anuncio y el aval obtenido desde Bogotá, desde hace ya un poco más de
un mes y aún sin arrancar; es la del Abogado y Concejal, con militancia en el
Partido Liberal, Roberto Moreno Posada; tal parece, la indecisión, obedece a la
falta de consenso al interior de los dirigentes de ese partido.
En este punto se hace
obligado, mencionar las últimas denuncias del prófugo, según él con
justificadas razones, de la justicia y a la espera de ponerse en manos de ésta,
el Ex alcalde Germán González Osorio; declaraciones que según observadores,
tienen un recóndito componente político, frente al esperado lanzamiento oficial
de la candidatura para la Cámara de Representantes de Moreno Posada.
Tal parece ante tantas
vacilaciones y dudas frente al lanzamiento oficial de esa campaña; y nuevamente
haciendo uso de su aguda imaginación y sagacidad; aprovechó, González, la coyuntura política para lanzar cargas de
profundidad a dicha campaña, recordemos que los principales denunciados, salvo
el último que cambió de posición política unas pocas semanas antes de la elección,
hicieron parte de la junta directiva de esa campaña donde salió elegido el
actual gobernante de los cartagüeños, el abogado Álvaro Carrillo.
Intentando ser pragmático y
alejados de los regulares, por no decir malos hasta la fecha, balances administrativos
del gobierno municipal; ahora lo que prima es la intención política frente a
las próximas elecciones, esperando también, que la comunidad se vea finalmente favorecida.
Entonces al Partido Liberal
le obliga diseñar una estrategia, intentando sacar un Congresista, tiene según las proyecciones con
que elegirlo, lo que daría la pauta hacia las Presidenciales; y finalmente
orientar una campaña para la siguiente Alcaldía 2016-2020.
Queda entonces insinuado que
dentro de la lógica del poder, el Partido Liberal, le obliga intentar no perderlo;
lo anterior solo se logra si la mencionada estructura política apoya la candidatura
de Moreno, y de paso despejar las dudas que dejó el ultimo comunicado a la opinión
publica por parte del ex alcalde; porque el que no tiene rabo de paja, se puede
arrimar a la candela electoral que se aproxima.
Los conocedores de este tema,
se atreven pronosticar que de darse esta candidatura, y a través de calculadas
alianzas estratégicas principalmente con Concejales y líderes del partido de la
U, la ASI en Cartago y el Norte del Valle, se darían las condiciones para elegir
otro representante a la Cámara.
Finalmente se siente un
tufillo de incomodidad, en la clase dirigente no conservadora, por la forma
como arrancó la campaña del Ex diputado e Ingeniero Civil Álvaro López Gil, apadrinada
por el Gobernador del Valle del Cauca, el político conservador Ubeimar Delgado;
manejando hábilmente y aprovechando el impacto mediático de unas obras, que en
su momento no habían sido aprobadas, y que se espera se inviertan en su totalidad
para beneficio de la ciudad.
Aparte de esa roncha de algunos
y siendo todo posible no en la dimensión desconocida sino en la política; ésta,
la de López Gil, es una campaña que prácticamente está consolidada en la Ciudad
de Cartago en el Norte del Valle.
No perdamos de vista y a lo
mejor aprendamos de esa envidiable disciplina
del Partido Conservador en la ciudad, que aún siendo una minoría, aprovechan la fuerza del compromiso y la unión; que los hace,
al momento de votar de alguna manera vencedores, y sobre todo para este tipo de elecciones.
Lo que le garantizaría, a
Delgado, por lo menos y castigando unos 5.000
votos en la ciudad, el resto es trabajo de la más delicada carpintería gubernamental
medir, cortar, pegar, lijar, pintar y barnizar en el resto del Valle del Cauca.
Amanecerá veremos.