ELECCIONES 2015 – UN POCO DE HISTORIA

Es correcto escribir “campañas” aclarando que éstas solo dan inicio cuando se cumpla el calendario que fija la Registraduría Nacional del Estado Civil tiempo que transcurre mientras se otorgan los avales o se cumplen los trámites para la recolección de firmas y en general se organizan las estructuras - asunto que requiere del trabajo refinado de orfebrería política - entre otros menesteres y requisitos.

Independiente de la anterior metodología y en tiempo real; tal parece muchos son los aspirantes, al primer cargo administrativo de la ciudad de Cartago en el Norte del Valle, cuya intención obedece a diversas razones: unos son guiados por sus enormes egos, aventura para algunos costosa, por el apoyo de sus amigos y/o padrinos, por el compromiso adquirido con el sector popular y medio o por el fervor espontáneo que despiertan en la comunidad.

Deben de tener presente, los posibles candidatos, que ese aparente entusiasmo no es medible a través de encuestas - estas solo dicen lo que el candidato quiere escuchar - ni por los favores que hagan, ni por las dadivas que entreguen, mucho menos por esta época decembrina.

No pierdan de vista que las comunidades que le “copian” a los líderes de barrio o comuna, están acostumbrados a este tipo de manifestaciones - no tan espontáneas de sus políticos -  la estrategia, de la gran mayoría, consiste en esperar la orden de voto la última semana o el mismo día de las elecciones.

Por todo lo anterior, de nuevo, insisto el principal reto, cuando se intenta interpretar iniciativas y hechos políticos, reside en la capacidad de desarrollar por parte del observador la habilidad para sustraerse de la concepción ideológica que poco pesa, en este caso, e independiente si milita por conveniencia en la derecha, centro, izquierda o intermedias tendencias doctrinarias.

Regresando al tema, las tres últimas campañas por la alcaldía han demostrado que poco inciden como estrategia - hoy lo intentamos demostrar - los compromisos burocráticos, las alianzas clientelistas y el poder económico “coyuntural” de los candidatos.

Ésta última variable es la que más afecta el proceso por aquello que los candidatos, provenientes de la clase media y humilde, terminan siendo respaldados por un poder económico no heredado de la tradición familiar.

Lo anterior significa que el elegido, para su desventura, termina con las nuevas reglas de juego renunciando o aceptando servilmente y “trabajando” para cancelar durante cuatro años la deuda adquirida y lo que “resta” del contrato verbal para su beneficio personal.

La clave en el ejercicio de la próxima administración municipal radicará en la experiencia, el temple y la habilidad del mandatario para tejer “productivas” alianzas estratégicas con los centros de poder a nivel departamental y nacional; todo para el beneficio de la colectividad.

Lo anterior significa que si el próximo alcalde por muy buenas intenciones que tenga - peor la desgracia si rápidamente se comprueba que es un inepto gobernante - no tiene acceso a las mesas de concertación y dialogo en lo agrario, la educación y la salud… Poco o nada podrá hacer por su municipio.

Para citar un solo ejemplo: el acceso a los recursos de las regalías, si poca influencia tiene como gobernante local y subregional, solo recibirá migajas del gobierno departamental…Cualquier semejanza con la realidad es solo coincidencia.

Reflexionando sobre el tipo de discurso político que esperamos, sin insistir en el discurso maniqueo de la lucha entre los buenos versus los malos, apunte a propuestas aterrizadas, coherentes y realizables por lo menos en los próximos cuatro años.

Ahora intentemos mostrar con cifras históricas los escenarios políticos y los grupos de poder que determinaron los resultados de las anteriores campañas.

Elecciones 2003

CANDIDATOS	VOTOS
José Luis Jiménez Agudelo	29.609
Rodrigo Durán Carvajal	7.867

                   Fuente: Registraduría

Los resultados de esas elecciones demostraron que fue el último intento, fallido, de la elite política local para llegar con candidato propio y de sus afectos a la Alcaldía Municipal.

Hoy podemos concluir, era inútil tal empresa, por cuanto ya empezaba a atribuirse el poder, desde Bogotá, lo que posteriormente se denominó Movimiento Popular Unido (MPU).

Recordemos que el gobernador elegido fue Angelino Garzón Quintero con 700.385 votos, de la mano del movimiento político “Convergencia Popular Cívica”, supuestamente muy cercano a la ciudad y tomando distancia cuando un sector del MPU le quitó el respaldo al recién elegido alcalde.

El resultado de ese cuatrienio 2004-2007 es por todos bien conocido; tras la renuncia del titular, le sucedieron cinco  (5) gobernantes en encargo quedando en la práctica acéfala esa administración municipal, sujeta al interés de los gobernantes en encargo de turno.

Elecciones 2007

CANDIDATOS	VOTOS
German González Osorio	24.401
Mohameth Duque García	10.747

                       Fuente: Registraduría

Hoy podemos concluir, que vivíamos aislados del gobierno departamental, por cuanto el poder vía Buenaventura estaba en manos del MPU; recordemos que el gobernador elegido fue Juan Carlos Abadía Campo con 676.199 votos, de la mano del movimiento “Por un Valle Seguro”.

Derivado de sucesivos escándalos se generó una primera atomización del poder, en el Valle del Cauca; hoy podemos afirmar que para esas elecciones se gestó una costosa alianza local, entre el partido de la U, Convergencia Ciudadana (Hoy Opción Ciudadana), Alianza Social Indígena (hoy Alianza Social Independiente) y un sector del Partido Conservador.

En contraprestación, a los resultados, a la elite política local (mayoritariamente conservadora) el sistema le entregó importantes cargos a nivel departamental y nacional; que poco se haya beneficiado la ciudad es tema de analizar en otra oportunidad.

El resultado de ese cuatrienio 2008-2011 es por todos bien conocido; tras la destitución del titular, le sucedieron tres  (3) alcaldes en encargo y el mayor acto de corrupción administrativa de los últimos tiempos.

Elecciones 2011

CANDIDATOS	VOTOS
Álvaro Carrillo	21.587
José de Jesús Villamil Quiroz	13.549

Fuente: Registraduría

Hoy podemos concluir, que continuamos aislados del gobierno departamental, por cuanto el poder, vía Cali, está nuevamente en manos del Partido Conservador; recordemos que el gobernador actual es el político Ubeimar Delgado Blandón elegido con un poco más de 200.000 votos.

Los resultados del actual gobierno, que termina en el 2015, son por todos bien conocidos: un municipio que bajó de categoría, sin obras de importancia estratégica y como si fuera poco unas finanzas públicas deterioradas por la negligencia y la incompetencia de los por competencia encargados de turno.

Basados en la historia contada, sin lujo de detalles, llegamos a las siguientes conclusiones: la primera. No es suficiente la aprobación desde Bogotá y el aval del partido; segundo. No son suficientes los compromisos burocráticos y las alianzas clientelistas; y Tercero. No es garantía para el triunfo, en las urnas, el poder económico “coyuntural”; recordemos, con un solo ejemplo, el caso de la última elección donde  a pesar de los enormes recursos financieros invertidos perdió por amplio margen el candidato de la U.

Para terminar en el presente análisis político no podemos comparar el comportamiento de las elecciones para Presidencia, Congreso y Alcaldía; hoy debemos hacer algunos supuestos basados en la reciente historia politiquera.

Para presidencia, históricamente poco han poco intervenido las maquinarias, en esta ocasión y frente al avance del adversario, se movilizaron las estructuras - nunca lo esperado - y  la votación en la ciudad se guió por el empuje de los candidatos.

Las de Congreso, recordemos los resultados del Centro Democrático con un poco más de 7.500 votos resultado que obedece a la lealtad comprada a la elite política local por los favores recibidos durante el mandado 2008-2010, más la expresión espontanea del ciudadano del común que voto visceralmente.

En esta ocasión, salvo se de la candidatura de Carlos Holmes Trujillo - que se fue hace 50 años de la ciudad -  ninguno de los dos aspirantes que reclaman el aval  por esa colectividad hacen parte de esa elite política.

Lo anterior sugiere que una parte importante de esa votación apoyaría  esa esperada alianza por la Unidad Nacional local de la que, tal parece, hacen parte, la U, el Partido Liberal, Opción Ciudadana,  un amplio sector del Partido Conservador y un sector de Cambio Radical.

El resto de los actores políticos, Autoridades Indígenas de Colombia, un sector de Cambio Radical, Polo Democrático alternativo, Partido Verde y lo que queda del MIO están a la espera de cual finalmente va ha ser el candidato por esa colectividad.

La U, en cabeza de la dirigente política la medica Dilian Francisca Toro Torres  intentaría recuperar parte de los 16.222 votos perdidos en la pasadas elecciones para Congreso.

El Partido Liberal espera conservar su votación para la próxima alcaldía, pese a que la actual administración municipal sirve como mal referente por su pésima gestión.

En este orden de ideas solo resta preguntarnos ¿Qué nos espera para las próximas elecciones?...Trabajar muy duro. Amanecerá y veremos.