Muy cerca está la fecha, 25
de junio/julio, en el calendario electoral para dar inicio/vence el período de
inscripción de candidatos.
Ésta última - la de julio - además
coincide con la autorización para empezar a utilizar propaganda electiva
empleando el espacio público (afiches, vallas, pasacalles, etcétera).
Como siempre esperamos una
campaña centrada, seria, amena, respetuosa y con un marcado enfoque empresarial.
Fecunda de ideas, propuestas
coherentes y aterrizadas; alejados de iniciativas asistencialistas, ya que está
comprobado que ese tipo de políticas han fracasado por la dificultad de
mantener un modelo con el retorno en la inversión social. En casos extremos se
promueve la holgazanería.
Más la imposibilidad para que
se convierta en un plan piloto productivo y autosuficiente. Se excluye de este análisis el
subsidio al adulto mayor.
Así ha sucedido y seguirá
sucediendo mientras no pongamos en la práctica aquello que a la gente no hay
que regalarle el pescado, sino enseñarle a pescar.
El propósito debería de ser
cambiar el paradigma del mendigo para brindarle más oportunidades, al
individuo, a través de una mejor
educación - hay que empezar por ahí – ya con ese elemento diferenciador podrá
dar los primeros pasos y en el mediano plazo avanzar hacia iniciativas de emprendimiento.
Volviendo a la campaña, también
esperamos el derroche de talento de los
equipos de trabajo encargados del marketing político de cada uno de los
candidatos.
Preocupados, el deber ser,
por la imagen y el mensaje que cada uno de ellos desee enviar a los potenciales
votantes; proponiendo cambios sustanciales en la forma de ejercer - no en la
fracasada forma de hacer - la política en los próximos cuatro (4) años.
Lo menciono porque de nuevo
se presenta la enorme oportunidad de recuperar la función principal de
concejales y alcaldes, los primeros encargados de ejercer el control político y
los segundos mostrar obras para el bienestar social.
Pasarán estas elecciones a
la historia como las que dieron inicio de manera prematura, tal vez por
estrategia sicológica, social y económica el que pega primero, pega dos veces y
sigue pegando.
Continúan desde sus orillas
los dos precandidatos - de origen liberal - que tomaron la iniciativa hace más
de 8 meses; sus estrategias se centraron y se centran en mostrar obras en la vía pública.
Su principal actividad fue
la construcción y reparación de estas a través del sistema de base granular; con
la obvia intención de llegar a las comunas y barrios populares con el celo de
sumar votos.
Hoy no vamos a juzgar si es
acertada o no la estrategia - queda la duda razonable -; el beneficiario fue
ciudadano del común.
No existe duda que les
mejoró la calidad de vida por lo menos en el modo de movilizarse; quedó en el
pasado la incomodidad del polvo, el barro, los huecos que la hacía peligrosa e
intransitable en época de invierno y verano.
Podemos concluir que se
empezó a cancelar una vieja deuda que se tenía con los habitantes que esos
sectores que a pesar de pagar impuestos no recibían ese tipo de obras.
La misma dinámica electoral
hará que en tres o cuatro meses, con toda seguridad, candidatos de diferentes
vertientes para concejo y alcaldía adelanten, allí, sus campañas políticas y
quede en el olvido - al momento de votar - los gestores de la obra inicial.
Siempre es un riesgo a tomar.
Recuerdo un comentario, que
muchos años atrás hacia un reconocido político… El problema no es hacer la obra
(la calle o carrera) el problema es mantenerse vigente en esa comunidad. Hoy se
confirma por aquello de la amnesia y la indiferencia colectiva de la comunidad
que siempre espera más; en parte tienen razón por el abandono de décadas.
Casi diez meses después
siguen los dos precandidatos con mayor opción para llegar al primer cargo del municipio,
no obstante hay que reconocer el trabajo realizado hasta la fecha por los otros
precandidatos.
Lo primero para aclarar es
que en su posición como precandidatos tienen el tiempo suficiente para
concretar alianzas, retirarse o ir hasta el final.
Del sector académico y
cultural viene el abogado y escritor Carlos Andrés Londoño Zabala, tiene previsto el lanzamiento de su último
libro para finales del presente año y se especula sobre la mesa, lo esperan, un par de
borradores.
Es una campaña que se ha
venido realizado con propuestas ambientalistas, turísticas y de inclusión
social; un sector de la opinión pública manifiesta que va hasta el final y otra franja de opinión insiste en una gran
alianza al interior de la casa Londoño Zabala.
No ha habido pronunciamiento
del precandidato. Su equipo de trabajo y aspirantes al concejo continúan con la
agenda electoral, se espera el comunicado de prensa oficial.
El también abogado Héctor
Fabio García García no dispone de una gran estructura política, ni del musculo
financiero para competir en iguales condiciones; tiene la oportunidad, si logra
realizar la convocatoria, para unir la izquierda local.
Su campaña se ha orquestado
a través de las denuncias en las redes sociales y la radio y como veedor
ciudadano se ha preocupado por la suerte del Hospital Departamental y las Empresas
Públicas Municipales y los actos de corrupción.
Con iguales derechos para
participar en la próximas elecciones hacen lista el abogado Jaime Enrique
Tamayo y el economista “Chepe” Peláez, con muy pocas opciones de elegir un
concejal.
De este último podemos
resaltar su prestigio profesional, bien podría prestar - en la próxima
administración - un enorme servicio a la ciudad por su experiencia en el área
planeación, formulación y evaluación de proyectos.
En pasados escritos he
reconocido que si se necesitara llamar por razones del servicio para prestar el tiempo, experiencia y energías a la ciudad el nombre del ingeniero Gabriel
Benjamín Agrado Restrepo tendría un lugar.
Debemos reconocer que su
actual campaña ha sido adelantada con entusiasmo y compromiso por la ciudad,
tal parece cuenta con el musculo financiero suficiente para llevar hasta el
final la contienda electoral.
Sin embargo e independiente
de las enormes exigencias, retos y sacrificios que va a demandar la ciudad; su naciente
estructura política no le permite alcanzar, para competir, una votación superior
a los 15.000 votos.
Insistiendo en ser llamado
por razones del servicio, bien podría en el mediano plazo servirle a la ciudad
desde el Congreso de la República. ¿Podrá esperar?
Para finalizar el también
abogado y político José Ignacio Londoño Zabala le va a contar en las próximas
elecciones la ventaja de haber heredado la estructura política - más de 35 años
- de su señor padre el desaparecido patriarca liberal Ignacio Londoño Uribe.
Requiere eso si de un
refinado y decantado ejercicio de orfebrería política para lograr el triunfo en
las próximas elecciones del 25 de Octubre; siempre existe la sentencia…Nada
está ganado mucho hay que trabajar. Amanecerá
y veremos.