domingo, 30 de octubre de 2016

PROYECTO DE PRESUPUESTO 2017

Si bien es cierto no conocemos ese documento, desde lo fiscal, administrativo y financiero, toda administración municipal - en este caso en la ciudad de Cartago en el Norte del Valle - debe garantizar la auto sostenibilidad vía recursos propios contemplado en la ley 819 de 2003 y demás normas relacionadas.

Estos municipios, comúnmente denominados “intermedios” la gran mayoría tiene serios problemas financieros, que obedecen principalmente a la incapacidad de generar empleo productivo desde privado, aparte de no desarrollar políticas públicas para garantizar la aplicabilidad de la regla fiscal, es decir generar, en cada vigencia más ingresos y disminuir los gastos de funcionamiento dándole paso a la inversión social y productiva.

Surge la pregunta  si no hay fuentes de empleo que bajen el indicador de desocupados en la ciudad, si somos prudentes en el análisis, que tal parece bordea el 40%...¿De qué vive el ciudadano del común?

Si bien es cierto, algunos estudiosos del tema niegan aceptar que nuestro municipio lo podríamos ubicar como estrato medio-bajo (3) argumentando que la estratificación nada tiene que ver con el ingreso promedio que percibe una unidad familiar; la otra realidad es que un porcentaje importante de la población vive de las remesas del exterior.

Son unidades familiares que no tiene acceso a un empleo formal o informal, sino que disfrutan – en su zona de confort – de los recursos económicos en dólares o euros que recibe de familiares en el exterior; son recursos que en su gran mayoría ingresan al circuito económico local como gastos y muy poco como inversión productiva o ahorro. ¿Habrá que educar, desde el colegio, en inteligencia financiera?

Son municipios, como el nuestro, cuya principal característica es pertenecer a la categoría cuarta (4), no debiendo estar allí, si por lo menos en tercera (3), lo que significa - según la ley 617 de 2000 - tener entre 20.001 y 30.000 habitantes, el municipio hoy proyecta un poco más de 160.000.

A propósito de la categoría; la administración municipal debió de expedir, este mes que mañana termina, el decreto donde le asigna la misma o una nueva categoría. ¿Permaneció en la cuarta o avanzó a la tercera? Que es en la que deberíamos estar.

Con unos Ingresos Corrientes de Libre Destinación (ICLD), según la ley, entre 25.000 y 30.000 salarios mínimos mensuales vigentes de aproximadamente ($689.455.oo) dando como techo, aproximadamente  a $20.684 millones; pudiendo estar cerca de los $28.000 millones y con una importancia económica grado seis. Lo invito a que investigue sobre este último tema.

Lo anterior significa que existe una tabla que ajusta a los municipios -los premia o castiga - dependiendo de si hacen bien la tarea que consiste en mejorar el recaudo, disminuir los gastos de funcionamiento y aumentar la inversión real social con base en la adecuada utilización de sus recursos propios. ¿Cómo va el tema de la modificación de la estructura administrativa en la que el alcalde tiene facultades pro-tempore?

Pregunta ¿Estamos recaudando los impuestos que deberían ser? ¿Estamos gastando en funcionamiento lo permitido, o más, según regla fiscal? ¿Estamos invirtiendo en infraestructura social, como prerrequisito para empezar a cerrar la brecha entre la población más vulnerable y la clase media, como prerrequisito para alcanzar la tan anhelada paz?

Siendo nuestro caso ¿Que pasa en términos técnicos cuando un municipio supera, de lejos, esa población estimada y con una actividad económica que no tributa como debería de ser?

Lo que en términos simples significa  que en  la proyección de sus ingresos reales podría esta por fuera del presupuesto de ingresos por lo menos $7.000 millones.

No negamos que la actual administración del abogado y escritor Carlos Andrés Londoño Zabala ha dado instrucciones claras sobre este delicado tema financiero como lo es mejorar la gestión fiscal del municipio.

Lo que históricamente conocemos es que cinco años después, el recaudo ligeramente sobrepasa a la vigencia fiscal del 2010 año en el cual se dió aplicabilidad a la última actualización catastral.

Desde lo técnico, ese recaudo del 2010 de $22.601 debió - para estimar el valor actual de 2017 - de crecer por lo menos en un porcentaje superior a la de la tasa de inflación causada, más el uno punto cinco por ciento (1.5%). Haga las cuentas.

Sin disponer de la información de 2016, solo nos resta esperar que el crecimiento del presupuesto para el 2017 por lo menos haya tenido en la cuenta el índice de precios al consumidor o la inflación del periodo.

Hagamos un paréntesis…Nuestro municipio según decreto 102 de 1 octubre de 2015, de nuevo, fijó la categoría cuarta (4) para la vigencia fiscal de 2016; surge la pregunta ¿Ya se expidió el decreto para la vigencia 2017? De ser así la opinión pública no lo conoce y que debe incluir dos certificaciones.

Son esas certificaciones: la expedida por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística - DANE - donde informa que la población proyectada para el 2016 debe de ser un poco más de 132.249 habitantes. ¿Esa cifra se ajustará a la realidad? Ya que algunos analistas proyectan una población cercana a los 180.000 habitantes.

Y la Contraloría Delegada para economía y finanzas públicas que certifica para nuestro municipio que durante la vigencia fiscal 2015 - base de la certificación - recaudó unos ICLD y presentó unos gastos de funcionamiento; para así determinar si cumplió con los parámetros de la ley 617 de 2000 o de racionalización del gasto público. ¿Se modificó el pasado indicador del 45.02%?

Ya que, desde la teoría presupuestal, la relación de gastos de funcionamiento versus inversión para un municipio ubicado en categoría cuarta (4) y en condiciones normales es de 70:30; lo anterior significa si bien es cierto desconocemos el nuevo indicador para 2016; ¿Reflejara la realidad del municipio ese indicador? 

Esperamos, para la salud financiera del municipio, que sí; ya que de buena fe así lo deberá de entender (creer) el ordenador del gasto; bajo el entendido que no es experto en finanzas públicas y deberá de apoyarse en el equipo económico del municipio.

Más allá de estas estadísticas ese equipo financiero y fiscal del municipio debe de avanzar en la estimación del Producto Interno Bruto (PIB) de la ciudad para así descubrir cuál es la real  base tributaria, proyectarla,  y hacer que sea mayor.

Surgen otras preguntas ¿Cuál será el recaudo, proyectado, durante el último trimestre (Octubre/diciembre)? ¿Ya tendrán estimado el déficit fiscal, no el acumulado, del 2016? Partiendo del hecho que tal parece para la vigencia de 2015 no se proyectó déficit fiscal. Por lo menos esa fue una buena noticia.

Esas cifras deben de ser conocidas, por la comisión de presupuesto que va a estudiar en citado proyecto de acuerdo del presupuesto para la vigencia 2017.

Finalmente, esa comisión deberá revisar bien el comportamiento histórico de los ingresos y de los gastos; y hacerse muchas preguntas sobre la información contenida en al Marco Fiscal de Mediano Plazo, el Plan financiero y demás anexos.

Sin conocer los resultados; de buena fe, no dudamos del esfuerzo de la actual administración municipal, durante este primer año, en la intención de mejorar las finanzas ´públicas del municipio en especial sobre los indicadores de recaudo en los tributarios y no tributarios; concentrando la atención en la recuperación de la cartera menos de 5 años y la depuración contable.

¿Qué medidas va a tomar para que se recuperen por lo menos los $7.000 millones de pesos que siguen por fuera del presupuesto desde la última actualización catastral ¿Cómo enfrentar la elusión y evasión de impuestos desde hace décadas?

Lo anterior sin tener en la cuenta que el municipio por ley, tal parece, le exige adelantar una nueva actualización catastral ¿Sera necesaria? o mejor insistir en mejorar el recaudo vía recursos propios. Amanecerá y veremos.

sábado, 22 de octubre de 2016

DE LA POLÍTICA LOCAL

Con el tiempo a favor de unos y en contra de otros; empieza a vislumbrarse, el acontecer político en la ciudad de Cartago en el Norte del Valle.

Si bien es cierto, tal parece, continúa la “luna de miel” entre el alcalde, el abogado y escritor Carlos Andrés Londoño Zabala; corren rumores en plazas, parques, cafeterías, discotecas y atrios de las iglesias; sobre un creciente malestar porque, según ellos, a algunas bancadas no se les ha dado la representación que se merecen.

Lo anterior y ha riesgo de equivocarnos pareciera que los quejosos, hubieran firmado un compromiso, con el hoy electo alcalde - donde se les otorgaba privilegios dependiendo de la votación obtenida - asunto que más tiene que ver con ambiciones personales que la de representar dignamente y trabajar por una colectividad que los eligió.

De hecho algunos concejales, utilizaron la franquicia política de determinado partido, solo para poder cumplir con el requisito de inscripción, pero en la práctica recibieron recursos y atendieron directrices de otro totalmente diferente al que les otorgó el aval.

En este orden de ideas y ateniéndonos a lo sucedido durante las últimas elecciones del 25/10/2015 quedó claro la enorme crisis política e ideológica por la que atraviesa el Partido Liberal en la ciudad; asunto que viene incubándose durante la ultima década.

También dejó claro, esa pasada elección, el fortalecimiento del Partido de la U que a parte de haber elegido 5 concejales; debemos de sumar los dos de Alianza Social Independiente que de hecho siguen las directrices de la gobernadora.

Es tan impredecible la forma como se conduce la política, o mejor la cosa pública, que si bien es cierto desde el punto de vista de como operan las maquinarias en la ciudad para las elecciones tradicionales; con el resultado final, en la ciudad, del plebiscito la Gobernadora volvió a perder aproximadamente 16.000 votos  durante el 2014.

En esa campaña llegó Roosevelt Rodríguez -su protegido-  que solo obtuvo 1.513 votos en la ciudad; perdiendo la gobernadora exactamente 16.659 votos.

Hoy volvemos a sospechar que todos esos votos perdidos, fueron a parar a manos Uribe; a lo anterior, hemos acordado llamarlo “el voto utilitario”; que con certidumbre volverá “sin vergüenza” a Dilian Francisca Toro, en las próximas elecciones para Congreso de la Republica en el 2018

Será que tiene razón la gobernadora cuando el 17 de junio de 2014 afirmó que “Cartago es muy paisa, muy Uribista y también conservadora…”  ¿Quién guía esa mano invisible?

Volviendo al asunto que nos ocupa hoy, lo que nos da razón en parte del análisis, es que con las elecciones de 2015  el Centro Democrático (CD); y a pesar de colocar 3 concejales en la ciudad, queda evidente que  uno es de origen conservador y los dos restantes son novatos en política y etiquetados con ese partido; sin contar que el candidato a la alcaldía que los representaba es de origen liberal; ahí le pongo ese trompo en la uña.
           
En realidad,  lo que nos da nuestras cuentas, a ese partido se le pueden contabilizar, 7.000 votos fijos viscerales, pero lejos está de fortalecerse como tal; ya que sus seguidores ocasionales lo hacen obedeciendo a ese liderazgo nacional, pero sin una organización ni fundamentación política local.

Lo que comprueba que los dirigentes políticos que, ocasionalmente, lo apoyan lo hacen más por utilizarlo como franquicia; y tal parece con escasos réditos económicos. Le sale económico al caudillo.

Así las cosas con el ambiente político que se esta creando, significa que durante el próximo año y de cara a las elecciones de 2018; empezarán, como es ya costumbre, las presiones y los consecuentes diálogos para apoyar a tal o cual candidato… E independiente de esa principal estrategia; la tarea será la de llamar, conciliar y direccionar; encargo que en parte recaerá sobre el próximo presidente del Honorable Concejo Municipal.

Sobre este asunto la tradición señala que, la designación del presidente se basa en unos acuerdos políticos, que se logran, entre las bancadas y la “puja” por el derecho que generalmente tiene que ver con la mayor votación obtenida y las que le siguen; la experiencia y profesionalismo del candidato, más, la lealtad para con el partido, y el liderazgo y compromiso social que haya demostrado.

Lo anterior significaría que la próxima mesa directiva deberá de adelantar, un arduo trabajo político y seguro sus integrantes representaran, los intereses partidistas interesados en consolidar esas “mayorías” tan necesarias para poder gobernar localmente mediante el dialogo y la concertación. ¿De eso tan bueno darán tanto?

En este orden de ideas, justo es reconocer el trabajo serio y dedicado, hasta la fecha,  del actual presidente el abogado Carlos Eduardo Marín Rueda; impulsando desde la presidencia, entre otros, importantes  acuerdos municipales entre otros: la modificación de la estructura administrativa, creación fondo de gestión del riesgo de desastres, otorgando facultades a la junta municipal de deportes y la creación del Consejo Municipal de Paz; el Terminal de Transporte Terrestre de Pasajeros; y la concesión del Aeropuerto de Santa Ana.

A tan solo 2 meses de terminar ese encargo, ya corre el rumor que empezaron a barajarse los nombres de los posibles candidatos para reemplazarlo en esa alta dignidad.

Los expertos en la materia insisten que el asunto se mueve bajo la presión de las bancadas en medio de rumores e intrigas, suenan entonces autoproclamados y postulados en su orden: por la bancada liberal el político Luis Enrique Zapata Sánchez, alguno de sus más cercanos amigos no duda en manifestar que es tal su empeño que movería el cielo y la tierra para lograrlo.

Por la bancada del Partido Social independiente, suena fuerte el abogado Víctor Alfonso Álvarez Mejía; debemos recordar que el citado concejal dió sus primeros pasos en política, en el 2005, de la mano del ex congresista Luis Carlos Restrepo Orozco.

Y si a eso le agregamos que en la pasada campaña para la alcaldía trabajó desde el comienzo y hasta el final con el hoy alcalde electo; lo hace muy cercano a la casa Londoño Zabala, sin perder de vista su cercanía con la actual gobernadora la medica Dilian Francisca Toro Torres.

Aparte que ha tenido la iniciativa de llamar la atención ejerciendo el control político sobre temas tan neurálgicos como la Salud, Transito y Transporte y Empresas Municipales.

Como es apenas obvio por el Centro Democrático, aspira el también abogado Carlos Mario Vélez, sin negar que le sobran ganas, juega en su contra su corta experiencia en la política local lo que lo hace vulnerable frente a las otras aspiraciones.

Si bien es cierto el tema primordial para discutir durante el mes de noviembre es el estudio y la aprobación del Presupuesto Municipal para la vigencia 2017; no de menor importancia es la responsable decisión que desde lo político significa el próximo Presidente del HCM y que proyectaría la baraja de candidatos para suceder a Londoño Zabala. Amanecerá y veremos.     

sábado, 15 de octubre de 2016

UN CONSENSO QUE LLEVE A LA PAZ

Que la mayoría de la población haya sido indiferente a ese momento histórico, tiene un altísimo precio para ser valorado desde los deberes y los derechos de cada uno de esos impasibles ciudadanos y que buscaba refrendar un acuerdo, a todas luces “imposible de ser perfecto”, de paz; que, de serlo, solo beneficiaria a un bando en discusión.

Algunos dicen que esa frustración, no creer en acuerdos, tiene su origen en junio de 1953 y después de 5 años donde el país estuvo en manos de una junta militar (hasta agosto 1958).

Le siguieron los gobiernos que hicieron parte del llamado frente nacional (Agosto de 1958/1974) cargados de hechos históricos - golpes de estado, presidentes de facto y  asamblea constituyente - con las posteriores consecuencias de desigualdad. ¿Tendrá justificación esa frustración? ¿Aún viven anclados en un pasado que ya no les pertenece?

Tan importante era y con mayor razón es, ahora, para el país; y más allá de los resultados del Si y el NO, que de hecho se había convertido en el propósito - unos mas sinceros que otros - de los últimos 7 (siete) presidentes la mayoría durante el siglo pasado y 9 (nueve) gobiernos a la fecha.

Debe de estar muy claro en el imaginario colectivo, que es sin duda una oportunidad, tal vez irrepetible, de seguir insistiendo con el cese al fuego, como garantía para seguir revisando y ajustando, algunas partes, de lo ya acordado.

Para de esta manera todos nos encaminemos como nación, hacia una verdadera paz estable y duradera; pero lo más importante…Sin más victimas que sumar a la escalofriante cifra de muertes, desapariciones y desplazamientos.

Eso es lo que, hoy, debe de estar llamando a la reflexión de esos colombianos, y a la comunidad internacional, que seguramente se pregunta cuales son las salidas para volver al camino correcto después de semejante ligereza.

Resultado solo comparable - guardada la proporción y los intereses de por medio - a lo también recientemente sucedido con los ingleses frente al Brexit / Gran Bretaña fuera de la Unión Europea.

De hecho, en ambos casos, casi nadie en especial los jóvenes  imaginaron las consecuencias en el mediano y largo plazo; solo en el corto se observaron como se tambalearon las principales bolsas de valores con influencia a nivel mundial; algo similar sucedió con el dólar en lo nacional.

Al punto que la misma realeza británica, actualmente, hace lobby en los diferentes países para bajar la tensión y llamar a la prudencia en el futuro manejo de las relaciones comerciales con ellos y la zona euro.

La razón que exponen los jóvenes ingleses – frente al monumental desplante y en entendida situación están nuestros jóvenes colombianos – fue que no estuvieron bien informados sobre lo que pusieron en juego, al no salir a votar, creando incertidumbre frente al crecimiento económico y la generación de más empleo, hecho igual de valido para el país, a lo que hay que sumarle la fragilidad de la existente paz.

Lo cierto es que, para el caso que nos ocupa hoy, fueron esos jóvenes y adultos jóvenes, esa inmensa mayoría del 62%, que se negó esa oportunidad de decidir la suerte de un poco más de 48 millones de almas.

La razón que pueden esgrimir,  y para abreviar, es que desconfían o en el peor de los casos, repudian la forma como algunos políticos anteponen  sus intereses personales y solo para satisfacer la necesidad de poder;  despreciando el sentir de toda una comunidad en gran parte vulnerable y una clase media que soporta todo el peso de una mala distribución del ingreso; en otras palabras dejan que los demás decidan por ellos.

Los que votaron por el NO “presumimos” lo hicieron con criterio propio guiados por el desarrollado sentido crítico y de pertenencia por un mejor país; posición que seguramente lo determinó el nivel educativo alcanzado, la condición socioeconómica y la no indiferencia frente a una sociedad que busca desarmar los espíritus guerreristas y anhela una paz estable y duradera.

Los que votaron por el SI; lo hicieron pensando especialmente en las victimas, o mejor con la esperanza de no sacrificar más  vidas humanas, la mayoría inocentes, y en la posibilidad que una vez terminada la guerra esos inmensos recursos poder destinarlos para la infraestructura, la inversión productiva y social.

En todos los casos y con la esperanza que dentro de 20 años la historia nos juzgará, ya no como ingenuos fatuos, sino como un pueblo sensato que corrigió a tiempo regresando al correcto camino que nos alejó de la desesperanza y nos permitió abrazar una paz estable y duradera.

Regresando a los resultados del plebiscito; y frente a esa nueva realidad, hay que reconocerlo, lo que hoy esta sucediendo nos llena de incertidumbre sobre el futuro de una sociedad que premia el machismo, egocentrismo, la exclusión y el populismo.

Este último simulado mensaje que propone desarrollar políticas públicas que defiendan los intereses políticos y económicos de los más pobres y vulnerables.    

Ahora es claro el hecho que la esperanza se centra en que funcione el multimencionado acuerdo nacional y partidista; y que ya todos en la mesa, los representantes de los gremios, los industriales, los partidos y las guerrillas ajusten los puntos neurálgicos acordados para que se le dé aplicabilidad a un nuevo acuerdo final.

Frente esa posibilidad, nos negamos a creer que paralelamente exista la posición infame del expresidente Uribe de dilatar el proceso hasta las elecciones de  2018 con el único propósito de satisfacer intereses mezquinos, para seguir manipulando conciencias con el único propósito de retomar el poder y seguir haciendo justicia con sus propias manos y legitimadas desde el Estado.

Reconocemos también que nunca fue fácil negociar con unas arrogantes guerrillas que solo pidieron perdón, utilizando sus propios tiempos, y en medio del protocolario discurso final; entendemos que es larga la lista de perdones, de parte y parte, para el descanso espiritual  de los familiares de miles de victimas directas del conflicto.

Reconocemos las salidas en falso de algunos funcionarios públicos en su deseo de protagonismo que exacerbaron los espíritus, no sacrílegos, de los defensores a ultranza de la moral y las buenas costumbres.

Sin perder de vista, los exabruptos de algunos primarios jefes guerrilleros que en su absoluta ignorancia sobre la esencia de lo acordado; pretendieron hacer protagonismo – los que nunca debieran haber estado allí – para intentar aparecer como victimas; y como si fuera poco el yerro, asumiendo actitudes victoriosas que lo único que hicieron fue alimentar el desprecio, en el imaginario colectivo, dado que tanto conocen de esos crímenes de guerra. Falto prudencia y se excedió en arrogancia.

También reconocemos que no fue fácil para los delegados del gobierno en la mesa de negociaciones, aceptar los inamovibles planteados por las guerrillas; esas delirantes posiciones deben de pasar por un nuevo rasero, teniendo muy presente de no mirar la paja en el ojo ajeno, ignorando la viga que está en el tuyo. 

Hoy, como en el pasado, reconocemos que el acuerdo no es ni será perfecto, pero para avanzar rápidamente y eficazmente se debe tener en la cuenta que las nuevas propuestas que deberán  llevar la luz suficiente…De tal forma que no sea tanta que queme al “santo” ni tan poca que no lo alumbre.

Estos consideramos, que busquen el consenso, son los temas que se deben tratar con los pies en la tierra y sin que haya borrón y cuenta nueva, pero sobre todo sin arrogancia e hipocresía y buscando el equilibrio de cada una de las partes a saber:

Entre muchos otros temas se deberá revisar  la reparación de las victimas y la entrega de los bienes adquiridos, pagar la pena con trabajo agrícola en empresas cooperativas,  libertad restringida y en sitios claramente determinados por parte todos los involucrados y responsables de actos de barbarie.

Uno de los temas que más molesta es la aplicabilidad de la justicia transicional frente a la justicia ordinaria, ahí habría que lograr un consenso para que las dos funcionen según lo amerite el caso y con el  alcance no solo a guerrillas y militares, sino a otros actores armados así como a ciudadanos, empresarios y ex-presidentes. 


Para terminar cito las palabras del Presidente, el economista, Juan Manuel Santos Calderón. “Vamos a lograrlo, vamos a lograr terminar para siempre con la violencia, el retorno de los desplazados a sus hogares, la oportunidad de que, como lo reconocen todos, con un país en paz el progreso, el desarrollo, el empleo lleguen a todos los colombianos. No podemos perder esa oportunidad” Tomado del Diario el País de Cali. Amanecerá y veremos. 

sábado, 8 de octubre de 2016

TEMA NACIONAL – EL PODER FUNESTO DEL POPULISMO

“Si bolívar viviera hoy y pudiera ver lo que ha ocurrido en Venezuela, Argentina, Bolivia, Ecuador, Brasil, Nicaragua, Cuba y Centroamérica, y constatara cómo la región por la que dio su vida se encuentra todavía a galaxias de distancia de los países desarrollados, su depresión probablemente lo llevaría al siquiatra”.

“A pesar de ciertos avances y señales esperanzadoras, el panorama general de la región es, en estos tiempos, desolador”.

“El nivel de idiotez, para usar el concepto del Álvaro Vargas llosa, Plinio Apuleyo Mendoza y Carlos Alberto Montaner, parece haberse incrementado en muchas partes a pesar de todas las pruebas de que el populismo, sea de derecha o de izquierda, es un rotundo fracaso”.

Mario Vargas Llosa. Nobel de Literatura, 2010. Contraportada del libro “El Engaño Populista” Axel Kaiser/Gloria Álvarez.

Ya habíamos advertido días antes del plebiscito, jornada que resultó no tan democrática por aquello del abstencionismo (62%), de los riesgos, para el SI, que representaba la amenaza por el manejo populista que se le estaba dando a las campañas, pero en especial por el NO por parte del Centro Democrático (CD). 

Al punto que, sin esperarlo, lograron su objetivo; tremenda ironía pero a la vez útil enseñanza para la historia y en la lectura de esta por parte de la actual y próximas generaciones. Tal vez en 20 años nos juzguen por lo idiotas que fuimos el pasado 2 de octubre.

Sutiles verdades a medias, mentiras, embustes y calumnias hicieron parte del repertorio, cuyo único propósito era confundir, despertar el miedo y el rechazo - no a la paz, sino a lo acordado - según el CD. Quedando tras bambalinas, como jugoso botín, la posibilidad de regresar a la guerra.

Los que seguimos intentando conocer y reconocer, ese ideario extremista, entendemos que fue otra falacia más, hoy comprobamos frente al triunfo del NO; que ni Uribe ni José Obdulio tienen, hoy, una propuesta coherente que indique un genuino deseo por alcanzar una PAZ ESTABLE y DURADERA; más aún, tampoco poseen sólidos argumentos para oponerse al regreso de la guerra; es todo lo contrario.

El argumento de Uribe de excarcelar, de inmediato, a todos los guerrilleros de base, tal parece, tiene como propósito que rápidamente regresen a sus zonas de influencia y, por temor y cansancio, retomen las armas.

A esa bondadosa propuesta de Uribe, hasta la fecha, se le opone el firme propósito de las guerrillas de mantener el cese bilateral del fuego y en general todo lo acordado; esperamos mucha sensatez y que conserven la calma y la prudencia.

Con el resultado, considerado por los expertos como un empate técnico, Uribe controla ideológicamente un amplio sector de la población - 6.3 millones de personas - que ya sea por sumisión, ingenuidad y/o analfabetismo político votaron atendiendo el llamado a movilizarse por el miedo a que el país cambie de rumbo. ¿De quién era realmente el miedo? ¿De Uribe? ¿Borregos o incautos?

Lo declaro así, porque de esa amplia votación solo un porcentaje muy pequeño, menos del 2%, corresponde a familias distinguidas, propietarias de grandes extensiones de tierra, rentistas de capital, industriales y grandes comerciantes; el resto es población vulnerable.

El resto son ciudadanos del común: a los adultos mayores que le hicieron creer que les iban a quitar el 7% de su pensión, a los asalariados – e informales la mayoría con menos del salario mínimo - que las guerrillas iban a ganar $1.800.000.oo pesos mensuales, a los ricos y poderosos  que les iban a expropiar las tierras bien adquiridas, a la población vulnerable que le iban a quitar los subsidios, a los religiosos que la familia se iba a acabar y que la comunidad LGTBI se iba a tomar el país y a los lugareños que en menos de 10 años nos convertiríamos en una nueva Venezuela; el imaginario colectivo se comió ese cuento.

Y con los otros, esa inmensa mayoría pasiva el 62%, que tal parece no representan la “opinión pública”; el expresidente, y sus asesores panameños y brasileros, logró inmovilizarlos; ya sea por cansancio emocional o pereza mental; los que permiten que una minoría decida la suerte de ellos, de sus familias y de todo un país. Son como el elefante que lo atan a una silla plástica y de ahí no se mueve.

Esa inmensa mayoría, la abstencionista, tiene en común: que no lee la prensa escrita los fines de semana - imposible sugerirles se lean un libro mensual - prefieren no salir de su zona de confort o siguen resignados a su ingrata suerte. ¿Será un problema cultural?

Y con seguridad muchos seguirán, por aquello de las apariencias, atados (no leer endeudados) a los planes vacacionales dentro y fuera del país - como clase social emergente, los nuevos ricos o los vergonzantes - todos usuarios obsesivos de la televisión por cable o satelital, la internet con su producto estrella: Netflix con sus narco producciones, películas de acción, novelas rosa, los torneos en diferentes disciplinas deportivas y las, con mayor rating, eliminatorias al mundial de Futbol - Rusia 2018. ¿Víctimas de su propio invento? ¿Cuál es el nuevo opio del pueblo?

Los menos afortunados, en el estrato salarial, son víctimas “inocentes” del fisgón que se recrea con el chisme de cuadra y barrio.

Los más audaces, también fungen como minoría, quedan expuestos a la intriga y  a la cacería política en plazas, parques, cafeterías, bares, estanquillos y atrios de las iglesias.

Hoy, entonces, trataré de alejarme del discurso de cientos de intelectuales, periodistas y columnistas que a lo largo y ancho del país han intentado explicarse para poder explicar los resultados, para muchos previstos, del pasado 2 de octubre.

Esa negativa de manejar el mismo discurso obedece, a que usted atento y respetado lector, así como  a la militancia del CD, no van a aceptar nunca las verdaderas razones que Uribe tuvo y tendrá para oponerse a una paz estable y duradera.

Ese actuar está regido por un dogma o ADN político que los acompañará mientras exista el CD; de hecho esa es una de las particularidades de los liderazgos populistas; la estructura política no sobrevive a la ausencia definitiva de su guía; sencillo no hay quien lo reemplace.

Es probable que usted no esté de acuerdo; pero los ejemplos sobran dicen los expertos, y no me considero uno de ellos, los Castro en Cuba, Chávez en Venezuela, Kirchner en Argentina, Morales en Bolivia y Correa en Ecuador, Lula en Brasil y en otro nivel Petro en Colombia entre otros. Por sus obras los conoceréis.

Es el caso de Uribe con 65 años, dentro de 20 tendrá 85; inclusive algunos afirman que su retiro está cerca y lo disfrutará en la Hacienda el Ubérrimo; de hecho no existe una figura emblemática y carismática, como el, que le suceda; no existe; y seguramente se asegurará que, y mientras esté activo, ninguno intente reemplazarlo.

Para continuar, recordemos lo que significa la palabra populista: Adj. Perteneciente o relativo al pueblo. II Partido político, que según diferentes épocas y países… Generalmente reúne la orientación religiosa y la democrática. III Tendencia política que pretende prestar atención especial a los problemas de las clases populares. Diccionario Hispánico Universal.

Con la definición anterior; queda entonces claro el protagonismo primero del ex-procurador Alejandro Ordoñez con su radicalismo religioso en contra del matrimonio y la adopción gay, la sexualidad de género entre otras posiciones fundamentalistas.

En segundo lugar la postura extrema que raya en el aparente fanatismo de Paloma Valencia (recuerden el cuadro con el divino rostro de Uribe reemplazando el Sagrado Corazón de Jesús en el apartamento de la bisnieta del Expresidente Guillermo León Valencia) todo fríamente calculado.

Y en tercer lugar le siguen, sin idolatría, los senadores por el CD: Alfredo Rangel  y José Obdulio Gaviria este último ideólogo y cerebro gris del Uribismo; todos en consenso manipularon el imaginario colectivo del militante y del ingenuo ciudadano del común (pensionados, maestros y algunos grupos religiosos) desde la moral y las buenas costumbres.

Consolidando, por ahora, un movimiento político-religioso que poco le falta para la idolatría. ¿Entonces que es un sofisma de distracción? ¿Cuántos son los incautos? ¿Quién es el chapulín colorado? Con toda seguridad no es Uribe.

No es una casualidad que Noruega y Suecia, países desarrollados que por fortuna tienen una lectura acertada del acuerdo y del proceso político por el que atraviesa la República de Colombia y representados en el Comité de Oslo que otorgó el Premio Nobel de la PAZ, hayan agilizado dicha entrega del premio.

Lo hizo el comité porque, tal parece, consideraron no solo el esfuerzo titánico del Presidente Santos; sino que entendió las maniobras y marrullas de la oposición, que hizo todo y más de lo que política y religiosamente se podía; para impedir que lo acordado condujera a una PAZ ESTABLE Y DURADERA. Llevando a una encrucijada lo acordado y firmado con fuerza jurídica en Colombia.


Ese reconocimiento internacional le dio un nuevo impulso al acuerdo y “obligara” a la partes: gobierno, guerrillas y al CD y por encima del cualquier partidismo o favoritismo; y más que un nuevo oxigeno político, lo acompañara con un genuino toque moral y de legalidad al proceso - entendemos que hay que hacer ajustes – y le dará celeridad, eso esperamos 48 millones de personas, para que por fin llegue la tan anhelada PAZ siempre y cuando lo allí finalmente consignado se cumpla; proceso que necesitará por lo menos 10 años, tiempo que se espera dure el postconflicto. Amanecerá y veremos.

sábado, 1 de octubre de 2016

EL PLEBISCITO – SI A UN NUEVO PAÍS

Los que tomamos la decisión de votar SI creemos en la certeza de construir un nuevo país pleno de esperanza y nuevas oportunidades.

Y lo hicimos, no porque el acuerdo final fuera perfecto; de hecho la perfección no existe; solo existen los ególatras perfeccionistas.

El acuerdo es  realizable - de hecho es largo el camino para implementarlo – porque desde el inicio se escuchó a la contraparte y con el tiempo (casi 4 años) se fueron ajustando los requerimientos de las partes que le apuntaban al bien común para casi de 50 millones de colombianos.

En esencia interpretó lo que la sociedad exigía era salvar vidas humanas, el desarme de las guerrillas, la oportunidad para que los familiares de las víctimas hicieran su catarsis y por fin cerraran el duelo ocasionado por la pérdida injusta de sus seres queridos.

La terminación del conflicto armado también empezó con el esperado gesto de pedir perdón por parte de las guerrillas a las víctimas, con ese perdón, seguramente se les hizo más liviana su carga expresada a través del cansancio fisco y moral por los errores cometidos, deberá seguir el desarme, la desmovilización y el desarrollo de una nueva etapa con la apertura democrática que significa la participación en política por parte de aquellos grupos alzados en armas, que hoy buscan escenarios políticos para defender unos derechos constitucionalmente adquiridos desde 1991 ya no por la vía de las armas sino a través del debate de ideas.

Vamos a votar, favorablemente, porque entendimos el horror la guerra, la que se ensañó con los más pobres del campo: pueblos enteros, centros poblados, corregimientos o veredas; donde la muerte y la desolación se asentó en la población más vulnerable.

A pesar de todo ese derramamiento de sangre, destrucción y atraso político, económico y social; era lánguido el balance final que indicaba - ya en tiempos del gobierno de Uribe – que muy lejos estaba la fecha y la oportunidad, desde lo militar, de garantizar la derrota y el sometimiento total de las guerrillas. ¿Qué le cuesta anhelar, pedir y dar los pasos necesarios para alcanzar la  paz y la prosperidad para todos?

Ahora es absurdo determinar quiénes fueron los triunfadores o los vencidos; en un país por fortuna o por desgracia polarizado, siempre gana por el simple hecho de salvar vidas y las partes acogerse a los protocolos de la justicia transicional la que determinará, según sea cada caso, midiendo con el mismo rasero los “pecaditos” de todos; salvo se diga la verdad, repare y se comprometa a la no repetición.

También ganaron las víctimas porque se las reconocieron como tales, y van a recibir el trato que reclamaban y se merecían.

Ganan las guerrillas, cuando abandonaron su soberbia y piden perdón por el dolor causado a las familias de las víctimas.

Se abre entonces la esperanza, para que se rompa el circulo vicioso de la violencia, que engendraba más muerte y destrucción, cuando la población inerme tenía como único albedrío el abandonar sus tierras para salvar sus vidas.

Ya por fuera de su hábitat,  y como cruel pago, y sin recursos pasaban a aumentar las estadísticas como desplazados y haciendo parte de los cinturones de miseria de las grandes, intermedias y pequeños ciudades y pueblos a lo largo y ancho del país; el resultado, como siempre, es el aumento del desempleo y la inseguridad.

Gana la patria ya que es el tiempo de recorrer un nuevo camino, diferente al de la guerra, por tal razón queda evidente que es la última gran  oportunidad para que la patria, por fin, empiece a cerrar brechas en educación, salud, vivienda, agua potable, empleo y atención a la población vulnerable.

Con estos propósitos se empieza a mejorar la calidad de vida de cientos de miles  de colombianos; que veía como la guerra solo traía muerte, atraso y desolación.

Con el fin de la guerra esos cuantiosos recursos, más de $55 mil millones de pesos por día; se destinarán para crear las condiciones necesarias que permitan generar crecimiento y desarrollo sostenible con responsabilidad social y ambiental; sin perder de vista que la seguridad ciudadana es obligación de todos.

Para lograrlo es necesario trabajar duro en la construcción de un nuevo sentido común, es decir lograr crear nuevas ideas y conceptos; abandonar el escepticismo de poder cambiar las reglas de juego de un establecimiento corrupto, de hacernos responsables de nuestras propias decisiones, respetarnos como seres humanos, actuar con criterio y jugar limpio en la búsqueda de bienestar para todos.


Lo anterior se logrará, en una segunda fase, cuando empecemos a mejorar la educación de nuestros hijos desde los hogares; ya que la paz, anida en los corazones y empieza por casa; la prosperidad llegará, como recompensa, por el esfuerzo realizado.  Amanecerá y veremos.